Thursday, June 9, 2011

Hidalgo o Teran?





En la nomenclatura de la geografía colotlense, de sur a norte encontramos a los caudillos insurgentes Miguel Hidalgo y Nicolás Bravo, acotando el breve fragmento de calle correspondiente a Basilio Terán, que de este a oeste, nos lleva de la parroquia de San Luis Obispo a la de San Nicolás. Apretado entre Hidalgo y Bravo corre Marcos Escobedo, en honor del perseverante y valiente insurgente colotlense que se levantara en armas para terminar el yugo español, en la cruenta guerra de independencia desatada por los antescitados.Fue Marcos Escobedo gran guerrero y benefactor de nuestra comunidad, cuya vida se extinguió bajo los estragos de una epidemia de Cólera Morbus en 1833. La calle Marcos Escobedo viniendo desde la Normal, entronca y termina en Basilio Terán, como sugiriendo un remplazo histórico en el liderazgo de esta comunidad, tal y como en realidad sucedió en los hechos. Marcos Escobedo fue el gran líder colotlense desde 1800 hasta su muerte en 1833, y Basilio Terán, quien llegara en 1849, viviría entre nosotros por cuarenta anos, convirtiéndose en el siguiente líder moral, promotor religioso y cultural de los colotlenses.

Pese a los muchos meritos de este piadoso sacerdote, los colotlenses lo tenemos en el olvido, y no se cuenta con información suficiente ni para construir una breve biografía de él. Los escasos datos que llegaron a nosotros provienen del documento histórico elaborado por José Antonio García Rivera, el cronista colotlense mas importante de todos los tiempos (y probablemente el único)y cuya única obra conocida fue escrita sobre un pedazo de piel de bovino y oculta en una parte de los misteriosos túneles que comunican puntos estratégicos de la ciudad. Para ser encontrada hacia 1928 por otro de los personajes mas controversiales de nuestra historia: Primitivo Huízar Robles, revolucionario, agrarista, gobiernista y aparentemente protestante y anticlerical. En dicho documento, García Rivera, se excusa de describir los meritos del padre Terán por ser de todos conocidos, sin embargo en diferentes puntos del pergamino hace mención de algunas de sus obras y actos.

El padre Terán, un hombre aun joven, de origen humilde, bondadoso y sobre todo determinado, piso tierra colotlense, por vez primera, en 1849 y esta fue la tierra que hizo suya y donde decidió morir. El Vino a Colotlàn con la misión expresa de concluir la iglesia de San Luis Obispo que se había comenzado a construir ochenta anos atrás sin poder terminarse hasta esa fecha, situacion que se relata a continuación:

Fue don Joseph Santiago Belís, gobernador del Barrio de Tlaxcala, con el cura Miguel Antonio Gómez y el maestro de arquitectura Raphael de Hernán, quienes el 11 de febrero de 1774, dirigieron una rogativa al obispo Alcalde en la que le informaban del mal estado en que se encontraba la iglesia parroquial del pueblo de Colotlán:

“Por estar desplomándose y amenazando ruina por su mucha antigüedad, y débil construcción. Por lo que, y tener paraje contiguo de más extensión y comodidad en que fabricar nueva iglesia parroquial ocurro a la característica y devota conmiseración de v. Exa. Suplicándole se digne conferirnos la superior licencia para la dicha fábrica la que a expensas de nuestro sudor y trabajo concurriremos gastos hasta su total perfección todos los hijos de los pueblos sujetos a este curato.”
Licencia que fue concedida por el virrey Antonio María de Bucarelí y ratificado por el obispo alcalde el 7 de junio de 1774; la iglesia se comenzó a construir y siguió un ritmo normal durante los siguientes 10 años. De esta iglesia se llegó a levantar la portada principal de estilo barroco a imitación de la de Zacatecas, la penuria económica de la región y la falta de iniciativas prolongó la suspensión de la iglesia por años.

En 1820 el cura Ignacio Suárez reporta que los pocos recursos de la parroquia los emplea en la construcción de la Nueva Iglesia:
“El estado de las Iglesias de este curato, y sus feligresías es el mas deplorable, con particularidad en esta cabecera, pues de cuatro capillas, que hay solo esta con alguna decencia la de Nuestra Señora de los Dolores, a la que compuse y repare con el fin de que sirva de parroquia, como lo expuse hace dos años, e impetre la licencia para depositar a nuestro amo; esta necesidad, me ha estrechado a no abandonar la fabrica de la iglesia, mayor que ha cuarenta y dos años, esta comenzado y en la que tengo invertidos la mayor parte de fondos de las cofradías, por esos motivos, son muy escasos. Solo dos están bajo un regular pie, que son de Nuestro Amo, y de la señora Santísima Trinidad de esta cabecera, las demás casi nada tienen, a excepción de la de San Diego en el pueblo de Tlalcosahua que cuenta unas trescientas reses.”

En 1839 el párroco José Tadeo Suárez informó al obispo de Guadalajara que con los mil pesos existentes en la parroquia se proponía continuar con la iglesia de piedra comenzada hacia muchos años, para lo cual la gente se había comprometido a ayudar, unos con trabajo personal, otros con dinero y otros con materiales.

Pero el impulso definitivo para su culminación lo dio en 1849 el padre Basilio Terán recién llegado a Colotlán como vicario cooperador del notable cura don Andrés López de Nava; el dinámico padre Terán se dedico a hacer mejoras materiales en el pueblo y a acelerar la construcción del templo, el cuál estuvo concluido en 1862. El nuevo alarife don José María Martínez, consideró que la fachada de estilo barroco a medio construir debería de ser sustituida por algo sobrio y moderno, y tomó el esquema neoclásico difundido en México desde la fundación de la Academia de san Carlos. La empresa del padre Terán no era perfecta, el frontispicio presentaba problemas de simetría y el campanario quedo inconcluso, debido a problemas de cimentación que amenazaban con fracturar por la mitad el edificio si se agregaba mas peso sobre la estructura.

Los recursos necesarios para la construcción de la Iglesia de san Luis Obispo, fueron cuantiosos y requirieron de la inversión de los dineros y el trabajo de varias generaciones de colotlenses. Por ello para culminar los trabajos de la misma, la diócesis de Guadalajara puso al frente de la magna obra a dos hombres diametralmente opuestos, pero igualmente talentosos y creativos. Don Andrés López de Nava: cura de altas y frívolas aspiraciones, don de gentes y hábil para recaudar recursos, pero banal y en extremo disipado: amigo de francachelas, buena mesa y juegos de salón y su contraparte, el padre Basilio Terán: morigerado, humilde, trabajador, infatigable, determinado y cuyo pasatiempo favorito era ayudar al prójimo. Quizás por ello don Andrés López de Nava, paso a la historia por la agudeza de su pluma y sobre todo el retrato caricaturesco que hizo de don Jesús González Ortega en los periódicos zacatecanos de la época, personaje con quien intimo y fue su huésped en su casa de Santa María, pero que con motivo de la guerra, le llevo el mejor ganado de su cuadra. Y López de Nava se vengo ridiculizándolo en la prensa, aun y después de convertirse en gobernador de Zacatecas. Don Basilio Terán, por otro lado cobro fama como el definitivo constructor de la iglesia de san Luis Obispo. Sin embargo es evidente que los dos trabajaron codo con codo, poniendo cada uno de ellos sus especiales habilidades para concretar el proyecto. Mientras que la incansable actividad del padre Terán se aprecia en la logística, administración y dirección de la obra. La mano de don Andrés López de Nava, se hace evidente en la recolección de limosnas, donaciones y sobre todo en la oportuna venta de todas aquellas propiedades pertenecientes al antiguo convento franciscano y de las cofradías que habían sido disueltas hacia 1848 . Ventas realizadas entre la gente pudiente de la comunidad y la región, en un ambiente enrarecido por los aires de la reforma Juarista.

No paso mucho tiempo después de su llegada, para que el Padre Terán comenzara a dar muestras de su incansable disposición en ayudar a los fieles de su parroquia y en fomentar su apego a la fe católica. Organizo concurridas procesiones llevando en andas a Jesús crucificado, San Nicolás y la santísima Virgen de los Dolores. El 19 de julio de 1850 apareció de nueva cuenta el terrible Cólera Morbus y se dedico a atender a los enfermos, sin temor alguno de contraer el mismo la enfermedad.

El padre Terán fue además de un hombre justo, un hombre valiente, jamás se arredro en defender a los débiles o indefensos de los abusos de los poderosos o la canallada. El primero de agosto de 1861, las tropas del líder agrario Manuel Lozada llegaron a Colotlán al mando del General Carlos Rivas, con la intención de vengar un viejo agravio que les inflingiera la gente de la región ocho anos atrás, cuando Bernardino Valero, jefe político del cantón, les había echo huir hasta la Sierra de Alica, al frente de un contingente de 400 voluntarios. Unas horas antes habían destrozado a las fuerzas de resistencia que les habían esperado a pie firme en el Salitre (Villa Guerrero) y en Colotlán la gente no se espero a que llegaran, con todo y la pertinaz llovizna que se prolongo todo el día, la gente salio de sus casas internándose en el campo y entre los cerros. Los Lozadeños encontraron un pueblo vacío y se dieron gusto saqueando casas y comercios, tirando los abarrotes, los víveres y los granos a la calle. Quemaron los archivos públicos, dejando las calles tapizadas de papeles mojados y a medio chamuscar. Cargaron con todo el ganado y caballada que encontraron a la mano y no contentos con esto, estaban preparándose para prenderle fuego a todo el pueblo, cuando intervino el Padre Terán, quien con toda la indignación de la justicia, consiguió que el Gral. Carlos Rivas hiciera desistir a su turba de sus nefastas intenciones.'

En 1884, el jefe político de Colotlán era Macario Pérez, quien abusando de su cargo , cometía todas clase de injusticias con los pacíficos habitantes. Situación por lo que era poco estimado en la población. No solamente por la pobrería si no por todos los comerciantes y la mayoría de hacendados. Sobre todo tenia serias dificultades con uno de estos últimos, el señor Antonio Sánchez Castellanos y un buen día en que la cuidad estaba sin resguardo, porque este había salido hacia el sur llevando una cuerda, se supo de la venida del hacendado Sánchez Castellanos; enterado también el jefe político, salio hasta el camposanto a encontrarlo, llevando algunos hombres armados consigo, al encontrarse ambos, montaron en cólera y se pusieron de rojo, pero don Macario opto por retirarse volviendo grupas a su caballo, en atención a que el hacendado traía también seis hombres armados.
La noticia del incidente corrió luego por el pueblo y los comerciantes aprovechando la coyuntura, comenzaron a regalar a los pobres barricas de vino, con lo que el populacho comenzó a enardecerse, después irrumpió en la plaza principal con el propósito de linchar al mal gobernante. El juez de la ciudad y otro hacendado el señor Eusebio Barragán se encontraban pacíficamente conversando en el jardín, y al comprender las intenciones de la multitud se metieron rápidamente al palacio gubernamental, cerraron todas las puertas y valiéndose de unos recursos contestaron el ataque, levantando una barricada de adobe, por dentro de la puerta del cuartel, por que los sublevados incendiaron la puerta de madera.

Permanecieron los asaltantes varias horas disparando las pocas armas con que contaban y apedreando el edificio hasta que requerido el padre Terán concurrió rápidamente y con suplicas calmo a la muchedumbre. Se cuenta de una brava hembra cuyo nombre se ha olvidado, que reiteradamente instigaba a los sublevados con calificativos insultantes.

Esa misma tarde volvieron los soldados que habían dejado la ciudad por motivo de la cuerda y considerando al populacho resuelto, decidieron vender caras sus vidas si las cosa llegaban tan lejos: avanzaron hasta la plaza con los fusiles caídos, en señal de no agresión. El famoso don Macario fue defendido por el cura Terán, quien le facilito la huida habiendo salido de noche rumbo a Guadalajara, vestido de mujer.
Días después, regreso don Macario a la ciudad, protegido por un buen piquete de soldados e hizo muchos prisioneros, principalmente los que el considero responsables del motín, mismos que fueron llevados a Guadalajara pero que no permanecieron mucho tiempo encarcelados ya que por influencias de las personas mas significativas de la población se organizo su defensa, habiéndose delatado al jefe con lo que conseguía su libertad y el cambio político a Tequila, donde meses mas tarde fue asesinado por un jefe rural de apellido Gordillo.

Las artes, la educación y las pequeñas industrias tuvieron una gran difusión durante el porfirismo, pero principalmente entre las elites, que las utilizaron como una palanca mas para ahondar sus diferencias con el populacho. En este desarrollo tuvieron un papel fundamental los sacerdotes, tales como el padre Terán en Colotlán, a quienes les toco vivir la confusión del periodo independiente, la violencia y anticlericalismo de la reforma juarista y que finalmente gozaban de una relativa tranquilidad que les permitía construir un nuevo tipo de feligrés: mas instruido en la fe y el mundo y capaz de defender sin vacilaciones la causa de la fe, pero también con una sensibilidad artística. El teatro, la música, la pintura amen de otras muestras artísticas populares fueron auspiciadas y promovidas en general por los ministros del catolicismo y específicamente por el Padre Terán, quien alentó a jóvenes creativos como Mateo Saldaña a seguir su vocación artística e inspiro a ,muchos otros a seguir la carrera religiosa. Promovió también la creación de escuelas y el seminario religioso, así como intervino para la construcción del viejo hospital (hoy colegio Jalisco) Su empeño decidido hacia el avance del progreso en todos los ordenes, le gano el gran ascendiente popular de que gozo en esta su tierra, así como la estima y deferencia de que gozo entre la gente ilustrada y la de posibilidades.

El padre Terán le dejo a los colotlenses un legado religioso que se extendió por varias décadas mas allá de su propia muerte, es en base a este trabajo de preparación, organización y sensibilización que es posible entender, porque cuando la revolución mexicana estallo solo un puñado de colotlenses se enlistaron en las filas revolucionarías, pero algunos anos, después, cuando los gobiernos revolucionarios cerraron los templos, la población urbana casi en su totalidad, se volcó en contra de la medida y de una forma u otra apoyaron la causa de los cristeros. Igualmente su ejemplo e influencia alentó a casi medio centenar de jóvenes a convertirse en sacerdotes en las primeras décadas del siglo XX.

Entre los diferentes espacios físicos que el padre Terán fue construyendo y acondicionando para la realización de sus ambiciosos proyectos, se encuentra el inmueble ubicado sobre la calle Hidalgo a un costado de la Iglesia de san Luis Obispo, que utilizo para allí formar el seminario religioso y que andando el tiempo llego a ser el Colegio Terán y que por varios anos sirvió como salón de eventos. Cuando la Escuela Normal Experimental inicio actividades en el municipio, ese fue el espacio donde tuvieron sus primeras clases y cuando al preparatoria regional se estableció en Colotlán, ese fue también el espacio utilizado para transmitir conocimientos. Mas tarde cuando la prepa encontró su local propio, le toco el turno de recibir hospitalidad al CUNORTE y en los últimos anos este importante y céntrico espacio ha venido a constituirse como una trascendente espacio cultural, pareciera que el espíritu de servicio y progreso que animo cada uno de los actos del padre Terán siguiera vivo en ese especial espacio.

Sin embargo nuestro olvido, desmemoria o ingratitud no nos ha permitido reconocer la importante y desinteresada labor que un hombre sencillo como lo fue el padre Terán realizo por nuestra comunidad. Ni tampoco hemos logrado entender que los terribles trances por lo que atraviesa nuestra sociedad están vinculados con esa incapacidad nuestra por promover verdaderos ejemplos de sencillez, trabajo, constancia y humildad. No la falsa e hipócrita humildad de los servidores públicos, que por un lado se llaman a sencillez y por el otro cometen los más vergonzosos actos de prepotencia y codicia. Para promover verdaderos ejemplos de conducta entre nuestros niños y jóvenes, es importante darles la presencia e importancia de los pocos lideres honestos y verdaderos que hemos tenido. Lo mínimo que como colotlenses podemos hacer es honrarle con su nombre en un espacio que fue tan suyo y tan querido por el como lo es el hoy llamado: Casa Hidalgo.

Entiendo que la gente de la universidad, que son pájaros que están solo de paso por este paraje y no les interesa mancharse su plumaje por nosotros, no se preocupen por un mejor nombre para su casa de cultura, pero que los colotlenses, los cronistas, las autoridades municipales, los profesores no sean capaces de manifestar la necesidad de un mejor nombre para este espacio, es algo que entiendo, pero que no acepto. Aunque no debería de sorprenderme, los colotlenses estamos acostumbrados a doblar la cerviz y aceptar que las decisiones que afectan nuestra vida, las tomen otros y en otros lugares. Desde la conquista española, los capitanes eran elegidos por los virreyes e incluso a veces por el mismo rey. Los jefes políticos los decidían los gobernadores e incluso el presidente de la republica. Y ahora en nuestra brillante democracia los candidatos de los partidos y sus regidores tienen que ser palomeados en las instancias estatales de los partidos y nosotros votamos, por aquellos que ya han sido preseleccionados para nosotros. Incluso los representantes estudiantiles del campus y la prepa son palomeados en Guadalajara y alguna vez se hizo lo mismo con los de las secundarias.
Para finalizar no me resta sino refrendar la pregunta inicial:

Hidalgo O Teran?

Monday, June 6, 2011

Teneria Haro



Don Ubaldo Haro, aprendió el oficio de curtidor, en el taller de su padre, don Jesús Haro Márquez, originario del Refugio. Aproximadamente en el año de 1935, se vino don Jesús a vivir a Colotlán, el comenzó con su negocio por la Nicolás Bravo, el proceso de curtido era entonces muy rústico. Don Ubaldo aprendio los fundamentos del oficio en el taller de su padre y tiene mas de 40 años curtiendo pieles y tiene la nocion de que antes había más pieles en la tenería que hoy en dia; pero quizás se debía a que el proceso de curtimiento duraba más tiempo y por ende las pieles permanecian mas tiempo en el taller.

Las materias primas fundamentales utilizadas anteriormente para el proceso de curtimiento de las pieles eran las cáscaras del árbol llamado timbre y del cual habia una gran cantidad en Mezquital del Oro, dicho material era un buen curtimiento. A partir de los treintas gano fama Colotlán por la calidad del curtido de sus pieles, en parte debido al uso extensivo de este producto y al conocimiento asimilado durante siglos de trabajar con las pieles en una region eminentemente ganadera. Entonces habia muchos recueros que se dedicaban a acarrear el timbre desde ese lugar hasta Colotlan, en una jornada que duraba varios dias. Pero fue en el año de 1960 que se acabo el timbre en Mezquital del Oro, por sobreplotacion del recurso y los curtidores desaparecion o debieron de utilizar otros productos, en la actualidad se compran productos de curtiduria que vienen de Argentina y África


Anteriormente todas las pieles que se procesaban localmente eran de animales de aquí mismo, había de 8 a 10 tenerías, como la del Sr. Martín Hernández, Pancho Pinedo, Pascual Solís, Gonzalo Frausto, Luis Castro y don Guadalupe Alejo. Pero la única tenería que funciona actualmente en Colotlán es la de don Ubaldo Haro. En esa época de los sesentas se hacía mucha montura para Jerez, se vendía baqueta en Torreón, las talabarterías producían principalmente monturas.

Por entonces el ganado era la segunda entrada de recursos para México, y en Colotlan era probablemente su principal fuente de ingresos. Algunos talabarteros a los que les producian pieles en esa epoca eran los senores: Herminio Huízar, los Fernández, los Cruz, don Luis Robles, Luis Vega, Nacho Quezada, Ramón Carrillo, Ramón Ávila. Pero del 65 en adelante comenzaron a no ser suficiente la producción de piel local y comenzaron a desplazar a los productores locales, los vendedores de otros sitios. La produccion local se desincentivo debido por un lado a la escases del timbre y a los altos costos de otros productos alternativos. Ademas el trabajo de la curtiduría era muy duro, pues no había guantes, y se trabajaba durante el frio con cal de tal forma que los curtidores o sus descendientes buscaron mejor otros rubros donde emplearse.

Algunas cosas han cambiado de los sesentas a la actualidad en el negocio de las pieles en Colotlan, pero la tradicion productiva familiar de la familia Haro sigue en pie, es la unica curtiduria que se mantiene en operación y ahora don Ubaldo se auxilia de sus hijos Miguel y Ubaldo Jr, quienes al igual que el mismo tienen trabajando en la teneria desde pequeños. Muchos de los procesos que anteriormente se realizaban a mano, hoy se hacen con máquinas, lo que facilita enormemente el proceso. Anteriormente el número de trabajadores en la tenería era de 8 trabajadores, en aquel entonces el tiempo promedio de beneficio de una piel, era de 4 meses. Hoy el promedio que tarda una piel en procesarse es de aproximadamente 22 días y en el taller trabajan aproximadamente 4 personas. El equipo de curtiduría es caro, la maquinaria que se utiliza aquí, tiene ya 20 o 30 años en otras fábricas.

Como el negocio de la curtiduria es ahora muy competido por vendedores que vienen principalmente de Leon, Gto, y Guadalajara Don Ubaldo complementa sus ingresos con la producción de calzado y las labores agrícolas, de 10 hermanos, el es el único que siguió el oficio de su padre. Afortunadamente en Colotlan, pese a que se desplomo la venta de cinturon piteado, se sigue produciendo una gran cantidad de montura, no solo lisa, sino también bordada, y es alli donde encuentra oportunidad para vender los productos elaborados por su teneria, principalmente el forro, aun cuando tambien trae de Guadalajara otros tipo de baqueta, para cintos y monturas. Si bien antes se compraban 40 rollos hoy se traen cinco o seis, los demás se producen aquí.

Se recolectan los cueros del rastro de aquí de Colotlán y de
Totatiche. Ellos captan un 90 % de los cueros de estos rastros. Beneficiándose unas 100 pieles mensuales.

Asi nos comenta Miguel Haro respecto del proceso de curtido de las pieles:

“El compromiso que tenemo es de levantar en el rastro, los cueros de casi todas las carnicerías, excepto de una, llegan del rastro se salan unos días, hasta que se junta una cantidad aproximada de 50 cueros, que es lo que puede la máquina. Después se pasa al remojo, durante dos días, cambiándoles el agua hasta que se les cae toda la sal. De allí se pasan al paleto, donde se les encala y se le quita el pelo, con cal y sulfuro. De donde salen completamente pelonas, con un trabajo aproximado de 4 horas en la máquina. Se les empieza a descarnar, quitándoseles el cebo, la carne, pellejo, con el descarnador, especie de cuchilla. Durante dos días se descarna y se enjuagan en un tambor, donde se elimina todos los residuos de cal. Se pasan a la división, se le llama rebajar, para que queden todos en una medida igual, dependiendo el grosor del tipo de trabajo a realizarse: para forro, guarache, funda, cinto o montura piteada. De allí se pasan a la rendida, en las pilas con sulfato de amonio y enzimas, a través de este proceso se acelera el proceso de preparación del cuero, para después realizar la curtida. La piel se ablanda un poquito , realizándose el proceso en un día o dos. Aquí se clasifica lo que va a ser forro, lo que se va a pintar, o curtir en blanco. Hay procesos que duran hasta tres días. Rendimos el mismo día todo, pero ya para pasar al siguiente proceso que es la curtida en sal, cada proceso tiene una diferente duración. Lo grueso, que va para pintarse se manda al tambor, y en un día se tiene listo. Ya pasando la rendida se curten en sal, con agua sulfúrico, en aproximadamente dos horas. Después de la curtida en sal, al día siguiente se echa un precurtiente, que se realiza en el tambor. Aproximadamente 15 0 20 pieles, según el peso de las mismas. Cada partida se trabaja en el tambor, una hora , durante ocho días tiempo en que se curten, de allí se pasan a reposar en agua con material curtiente, hasta que se tiene la oportunidad de irlas sacando. Una vez curtida se pasa a pintura, que es un proceso en varias etapas, con materiales recurtiente, anilina, aceite y aproximadamente 3 horas.. Se pasan a enjuagar, se embancan y se pasan a desvenar en otra máquina, después de cuelgan para que pierda humedad el cuero, y después al secado, de un día para otro y de allí la medida, la planchada y al mercado. “

Don Ubaldo y sus hijos en la venta de sus productos tienen que ofrecer un precio más bajo que el de los grandes productores, por que la calidad no es la misma. La piel que producen la venden en Jerez y en otros lugares. La mayor cantidad del producto de ellos lo venden hacia el cañón: Villa Guerrero, Temastian, Chimaltitan, Bolaños etc. Pero son también introductores de la piel de compañías que producen en León, Gto. La competencia viene de diferentes lugares. Para conservar el mercado es necesario mantener buenos precios y calidad, y de esa forma es que han logrado sobrevivir en un mercado tan dificil.

La Hacienda de Huacasco






La Hacienda de Huacasco que significa “Corral de vacas” fue fundada aproximadamente hacia 1700 y se dice que desde su inicios fue una hacienda muy rica, con grandes cosechas y muchos animales. Tres generaciones sucesivas fueron los propietarios de la misma, hasta antes de convertirse en su mayoria en ejido y ser comprado por un cuarto propietario. Los Llamas, los Sanchez y la familia Zulueta integrada por don Juan Zulueta (dueño) y sus tres hijas y finalmente don Rodrigo Ortega Anzures, hijo de Fernando Ortega Huizar, quien fuera el ultimo administrador de la hacienda hasta el momento de la afectacion agraria.

La extensión territorial de dicha Hacienda era aproximadamente de 1000 hectáreas que comprendía lo que ahora es la colonia 18 DE MARZO (EL CERRITO), LA CEMENTERA que está entre el Cerrito y Huacasco, lo que es Huacasco y la casa o casco de la hacienda que era muy grande y que actualmente esta deshabitada y en proceso de convertirse en ruinas, tal y como ha sucedido con las enormes trojes utilizadas para guardar los granos y que hoy estan desmoronandose.

En sus tierras se sembraba maíz, chile, papa, frijol y trigo que se regaban con el agua de la presa, la que ahora está seca; cuando el trigo ya estaba en su punto lo desgranaban, subiendo unos caballos para apisonarlos; después lo guardaban en las trojes, lo mismo hacian con los demás productos, como el maiz y el frijol. Los peones de la hacienda trabajaban de sol a sol y en condiciones deplorables. Se dice que ni siquiera podían cortar de los elotes que ellos mismos cultivaban, para llevar a su casa y comer con su familia; pues de enterarse el patron de que alguien se los robaba, lo corrían y mandaban cartas a todas las haciendas cercanas para que no lo (los) recibieran pues era una amenaza ya que corrían el riesgo de que también les robaran sus productos.

Situacion que ponia a las familias en graves aprietos pues en un radio de 30 a 40 kilometros la mayor parte de las tierras pertenecian a las haciendas. Entre ellas: la hacienda del “Cacalote”. “El Cuidado”.”El Laurel”. Y la hacienda de “los Cardos”.
Algunos propietarios famosos de estas haciendas lo fueron: del Cacalote el señor Eugenio del Hoyo. El dueño de la hacienda de los Cardos era un obispo y la atendías dos de sus hermanos, uno de ellos llamado Pascual Alba y el otro Donato de Alba. Los duenos de la hacienda del Laurel era la familia Villalpando. Y como habiamos dicho de la hacienda de Huacasco la familia Zulueta. De la hacienda del Cuidadose desconoce sus dueños en ese tiempo.


Los campesinos vivian y trabajaban en las haciendas por pura necesidad, y apenas para sobrevivir, pues el salario no les alcanzaba para comer ellos y sus familias, ademas que que el patron se encargaba de endeudarlos en la tienda de raya de la hacienda, que era la única en la que podían comprar y que controlaba el patron, con precios elevadisimos. Tarde que temprano el peon se endeudaba con el patron y las deudas pasaban de generación en generación. Los peones y sus familias se encontraban hambrientos ya que se les daban tres litros de maíz al día para que comieran, pero como eran demasiados miembros en una familia aproximadamente de 7 a 10 no les alcanzaba para alimentarse. A ello se le aunaba la falta de higiene pues andaban muy sucios, vestían ropa de manta o tela de la más corriente y no les daban otro cambio hasta que ya no podían sostenerse en su cuerpo por lo roto, no se bañaban, pues no tenían jabón y la mayoria criaba piojos. Esta pobreza y explotacion fue la que orillo a todas estas gentes, cuando vino la revolucion a levantarse en armas para pedir el raparto agrario en toda este region, junto con los agraristas del otro canon, encabezados por Agustin Rivera y la gente del Carrizal y san Nicolas.

Se dice que las señoritas Zulueta eran muy buenas personas ya que cuando alguien se enfermaba ellas lo curaban con remedios caseros. Al morir don Juan Zulueta, las hijas se hicieron cargo de la Hacienda, y nombraron su administrador al señor Fernando Ortega Huízar siendo este más consciente con ellos pues:
Les permitia llevar de los productos que se cosechaban, a sus casas lo que anteriormente no se podía, ya no tenían hambre, comían bien aunque, seguían trabajando de sol a sol igual que antes. Y se les aumentó el sueldo de 1 a10 centavos, fue un gran avance ya que podían comprar más cosas que necesitaban, aunque en la tienda de raya.

Entre 1935 y 1940, como parte de los repartos agrarios de la Revolución de 1910, se afecto la hacienda de Huacasco con aproximadamente 200 hectáreas, con las cuales se formaron varios ejidos,entre ellos el de Tenasco. Y el casco de la Hacienda junto con las propiedades correspondientes de acuerdo a la ley, fueron vendidos por las Zulueta al Sr. Rodrigo Ortega Anzures, prominente personaje en la politica del municipio de Colotlan y diputado local suplente en Jalisco en varias ocasiones, asi como representante de la oficina de hacienda por muchos anos.

Entre los primeros ejidatarios de Tenasco se encuentran :

 Luis Márquez (finado)
 Alcario Martínez (finado)
 Pedro Martínez (finado)
 Juan Lira (finado)
 Francisco Lira (finado)
 Jesús Márquez (finado)
 Jesús Ponce (finado)
 Francisco Gutiérrez (finado)
 Jesús Gutiérrez (finado)
 Baudelio Gutiérrez

Los nuevos ejidatarios que existen actualmente lo son sido por herencia, les donaron un derecho y ahora son 72 ejidatarios

En su momento los repartos agrarios provocaron gran controversia entre las personas de la comunidad, pues la poblacion se dividio entre los que estaban a favor del reparto y los que estaban en contra. Desde luego que la gente de dinero estaba en contra y lo curioso era que los sacerdotes tambien se oponían a ala formación de ejidos, no obstante el beneficio social que prometian y el final de la explotacion de los campesinos. Tambien muy pronto fue evidente que hubo tambien una decaída en la importancia de la produccion de la hacienda, al declinar el control de los amos sobre la produccion y los ritmos de produccion, organización y financiamiento de la produccion.

Para 1960 muchas de las personas que adquirieron parcela, ya habian emigrado a trabajar en Estados Unidos, cuando regresaban se notaba la diferencia pues se distinguían por el tipo de ropa que usaban y la limpieza se empezó a usar el jabón y las personas se hicieron más limpias. Pero tambien mucha de la tierra tradicionalmente cultivada se quedo ociosa.

Por Monica.

Saturday, June 4, 2011

El campo colotlense


Colotlán tradicionalmente fue un pueblo compuesto principalmente de ranchos y unas pocas haciendas. La localidad se encontraba dividida en muchos pequeños productores, que aprovechan los terrenos adyacentes la río para cultivar hortalizas y frutales. Sin embargo la unidad productiva fundamental lo fue el rancho, cuyas extensiones fueron muy inferiores a las haciendas, de las cuales hay unas pocas. Poco antes de estallar la revolución Mexicana, en Colotlán se vivía una época de progreso sin paralelo en su historia, durante los años de la dictadura, se había consolidado una clase social que había medrado económicamente en la agricultura, la minería, la ganadería y el comercio. Dicha clase social se había convertido en el puntal del desarrollo económico municipal, al diversificar sus inversiones en pequeñas microempresas que comenzaban a generar una variada producción de artículos de consumo local y regional tales como: harinas, jabones, veladoras, ropa, bebidas, muebles y pieles. Además de ser uno de los principales polos comerciales en la región.

Los primeros años de la revolución, desaceleraron esa inercia productiva, y los continuos conflictos armados, que culminaron con la guerra cristera, terminaron con esa vocación productiva. Los inversionistas más importantes, junto con sus capitales se desplazaron a las ciudades de Guadalajara, Zacatecas, Aguascalientes y México. A principios de la década de los treinta, cuando se restableció la paz y los empresario sobrevivientes intentaron retomar el rumbo, fue muy tarde. Colotlán y su región habían quedado aislados del panorama nacional, no solo por el avance económico general, sino por la decidida actitud oficial, que condeno al ostracismo a los fanáticos cristeros, coterráneos de Huerta.

En forma similar, la revolución y el posterior reparto, pusieron una gran presión en los propietarios de tierras, sobre todo los hacendados y rancheros, propietarios de superficies mucho mayores a las marcadas como pequeña propiedad. El rancho como unidad productiva característica de la zona norte de Jalisco, requería de una cierta superficie mínima de tierra que le permitiera la autosuficiencia. En ella se incluía, cierto espacio dedicado especialmente para la agricultura de temporal, que eran las mejores tierras del rancho, así como otros espacios de pastizales dedicados exclusivamente para el ganado. El reparto agrario tal y como fue planteado por los revolucionarios, no tomo en cuenta las características de las diferentes regiones de la república, y su organización productiva. Dando como resultado que al realizar el reparto agrario, buscaron, no que las nuevas estructuras productivas fueran eficientes, sino el de beneficiar a la mayor cantidad posible de campesinos.

La realidad es que la reforma agraria alcanza modestas proporciones en esta región, afectando al término de sus repartos apenas un quinto de la tierra disponible en el municipio. Las cuatro quintas partes restantes permanecieron en manos de los propietarios originales. Aún cuando en muchas ocasiones tuvieron necesidad de dividir las propiedades y cambiarlas de propietario, adjudicándoselas a hijos, familiares y otros prestanombres. Pero el conflicto social que se desato con el reparto de las tierras, al interior de la comunidad mantuvo durante décadas vivo un enfrentamiento entre clases y grupos sociales.

El estado y gobiernos revolucionarios a través del reparto de tierras, consiguió fortalecer su posición política al interior de la sociedad mexicana. Al obtener aliados y el respaldo de amplios grupos de la población, quienes realizaron funciones no solo de apoyo político, sino también militar. Los ejidatarios o candidatos a serlo (conocidos también como agraristas), se convirtieron en los fieles esbirros del gobierno. Carne de cañón utilizada para controlar las diferentes regiones de la república, así también como los perros guardianes del gobierno, utilizados para sofocar las rebeliones y controlar políticamente los pueblos. En nuestra región cumplieron esa función a cabalidad, al convertirse en una de las principales fuerzas políticas, así también como una parte importante del ejército con el que se enfrento el gobierno a diferentes conflictos, principalmente la llamada guerra cristera.

De entre los agraristas se destacaron rápidamente algunos personajes por su intrepidez, inteligencia o codicia, en nuestra región el principal líder agrarista será Agustín Rivera, originario de la comunidad del Carrizal, y quien organizara políticamente a todos los campesinos solicitantes de tierra. El grupo agrarista se enfrentara al grupo de los propietarios de tierras, organizados en el partido conservador, y durante los años treinta y cuarenta sostendrán un permanente enfrentamiento, por el control político del municipio y la disputa por las tierras. Dicho conflicto tendrá su punto más álgido con el asesinato de Agustín Rivera, y la posterior venganza de los agraristas quienes asesinaran a su vez al presidente municipal y uno de los principales lideres de los ricos. Después de ese conflicto, las aguas regresaran a su cause normal, olvidándose poco a poco esas viejas rencillas y enfrentamientos de clase. En realidad, los mayores propietarios de tierras encontraran el subterfugio legal para respaldar sus propiedades, a través de la división de sus propiedades entre hijos, familiares y prestanombres, y evitando así que los agraristas les arrebaten sus tierras. En tanto que los agraristas siempre deseosos de más tierras, hincaran sus garras en aquellos más despistados, o vulnerables.

Es hasta hace algunas décadas que la sociedad colotlense ha dejado de ser autosuficiente en la producción de sus alimentos, ello debido a la crisis que sufre el campo mexicano en general. La descapitalización del campo y la migración de los campesinos a las ciudades ha provocado también en Colotlán, una creciente perdida de productividad de nuestros ranchos y ejidos. Tan solo unas pocas localidades de nuestro municipio han conseguido arraigar por lo menos parte de su población, ello en parte gracias, al decidido esfuerzo por construirles infraestructura básica, que ha venido a mejorar sus vidas, por lo menos con electricidad y en algunos de ellos con agua potable. Sin embargo, el grueso de la población que hace 30 años aún habitaba en el campo, se ha movido a Colotlán, otras ciudades nacionales o el extranjero. Dejando de tras de ellos centenares de casas en ruinas y parcelas abandonas.

Es innegable que la calidad de vida de la población del municipio de Colotlán se ha mejorado significativamente en fechas recientes, pero es también cierto que ello no se lo debemos al campo, sino precisamente a toda esa gente que ha salido de sus comunidades en la búsqueda de mejores opciones de desarrollo personal y familiar. Nosotros nos hemos visto beneficiados por ese arte noble que es el piteado, y que le ha dado de comer a muchas familias colotlenses, y ha conseguido hacer ricos a unos cuantos. Pero quizás el caudal de ingresos más constante desde los años cincuenta a la fecha, sean las remesas de dólares enviadas por nuestros campesinos, quienes convertidos en braceros en los Estados Unidos han construido el Sueño Americano, y sostenido a sus familias en tierra colotlense..

El campo colotlense tiene décadas olvidado por el gobierno federal, gobierno que finco el desarrollo industrial del país sobre las espaldas de los campesinos. Es verdad que nuestro campo, no es el mejor, ni el más productivo del país. Sin embargo, han demostrado otros pueblos que habitan en condiciones más desperadas, que existen formas de convertirlos en altamente productivos. El caso israelita y el español, son ejemplos útiles de esta situación. Pero para ello debe existir voluntad por parte de todos los involucrados. En nuestra región no ha existido jamas el compromiso verdadero para con nuestro campo y sus gentes. Las instituciones estatales y federales vinculadas con los problemas agrícolas que desde los años setenta se instalaran en nuestra región, jamas han hecho nada por encontrar soluciones productivas viables para nuestra circunstancia.

Al campo colotlense en los últimos cincuenta años se le ha apoyado muy poco, se han ofrecido apoyos de forma intermitente, y siempre insuficiente. Son los ejidatarios quienes han recibido los mayores apoyos, en equipos, capacitación, precios de garantía, prestamos productivos etc. Sin embargo por diferentes razones han resultado infructuosos. Nunca se ha conseguido aumentar la producción de los cultivos tradicionales, y tampoco se han implementado nuevos cultivos que pudieran proyectar la actividad agrícola en diferentes mercados y con mayores dividendos. Es en este marco en el que el gobierno federal promueve un nuevo proyecto que venga ayudar las problemáticas del campo, a través de la creación de un Consejo Municipal para el Desarrollo Rural Sustentable.

En la actualidad, el grueso de la población colotlense habita en la cabecera municipal. Aproximadamente el 70 % de la población, en tanto que el restante 30% se reparte en todo el municipio. Los niveles de calidad de vida, son indudablemente superiores en la ciudad, con la facilidad de servicios básicos de agua, electricidad y drenaje. Así como mayor disponibilidad de servicios de salud, educación y fuentes de trabajo. Respecto de la tenencia de la tierra tenemos la siguiente situación: de las 50,646 hectáreas registradas, el 20.12 % son de propiedad social, es decir ejido, y el 79.88 % son de propiedad privada. No existiendo propiedad de comunidad indígena alguna.

El sector ejidal lo integran 9 comunidades (Colotlán, Casallanta, Sauz Tostado, Santiago Tlatelolco, El Epazote, San Nicolás, Saucillo de los Pérez, El Zapote y El Carrizal).

La escasa productividad de nuestra tierra, esta directamente relacionada con la disponibilidad de agua. Las localidades más prosperas del municipio son aquellas que tienen garantizada una mayor cantidad de agua durante todo el año. En cambio en aquellas comunidades donde la falta de agua es un problema crónico, es donde encontramos a la gente más pobre e indolente.

Los resultados de la política agraria seguida por los gobiernos de la revolución salta a la vista, en Colotlán como en muchos otros lugares del país. El reparto agrario y la política seguida en el campo, en lugar de fortalecer la producción agrícola y ganadera genero una inseguridad e indiferencia total. Los ejidatarios que adquirieron las tierras no fueron capaces de realizar la titánica tarea que les fue encomendada, y para la cual no se les dio apoyo alguno. Los propietarios originales perdieron todo interés en mantener o incrementar la productividad de sus predios, y mucho menos de invertirles, ante la incertidumbre de tener que entregarlas a los ejidos. Así ante la incapacidad manifiesta de unos, y la negativa rotunda de los otros, las tierras que en algún momento tuvieron un regular potencial productivo, fueron decayendo con la irracional explotación de la tierra, la tala inmisericorde y la feroz erosión que jamas fue prevenida.

La verdad es que a estas alturas del partido, el rescate del campo parece misión imposible, pese a las buenas voluntades de todos los alcaldes de la zona norte, quienes recientemente han iniciado una serie de reuniones para generar un proyecto millonario de desarrollo. Los miles de millones de pesos necesarios para traerlo de regreso a la vida, nos parecen una exageración, y hasta quizás una tarea estéril. Alcanzar la productividad de los gringos y los europeos es quizás tan solo un sueño.

Friday, June 3, 2011

El Cine Colonial



Dos son mis pasatiempos favoritos, la lectura y el cine y en la actualidad ante las exigencias de la vida moderna que le absorbe a uno hasta la ultima gota del tiempo libre, es casi imposible dedicar el sagrado tiempo a la lectura de un buen libro. Asi que es mas facil y expedito reventarse la version cinematografica del mismo o de cualquier otro, con el respectivo ahorro de tiempo y energia, aun cuando privandose un poco del prolongado placer que solo una buena lectura produce . Mi historia como cinefilo es aun mas aneja que la de lector y esta aficion se la debo totalmente a mi madre que siempre fue fanatica irrefrenable del cine. Me recuerdo aun de brazos, siendo arrastrado entre el vendaval de gente que se apenuscaba al ingreso del cine Colonial. Y gracias a la repetitiva politica de exhibicion de la empresa “Cine Colonial”, estoy seguro de haber sido testigo de los diferentes ciclos del cine nacional, que eran los preferidos de mi progenitora. La filmografia importante de la epoca de oro del cine mexicano y los diferentes experimentos de los anos sesenta y setenta, forman parte de mi cultura peliculesca y desde luego que tambien fui testigo de la vergonzoza decandencia de los anos ochenta en la que la moda de las peliculas de ficheras, Chente, los hermanos Almada y Chespirito dio al traste con lo poco que quedaba de arte, de este septimo.

Mi ninez y juventud estuvieron marcadas por el ritmo de la marcha de Zacatecas y en la penumbra de la sala del cine colonial, con un plato de picosas gorditas y una coca bien fria, se gesto mi pasion por el septimo arte, gusto que me acompana a dondequiera que voy y que ha hecho de mi un empedernido aficonado del cine de todos los confines del mundo y un coleccionador compulsivo de peliculas biograficas, que semana a semana visita biblioteca, caja roja o blogbuster para proveerse de la dosis semanaria de adrenalina o reflexion necesarias para mantener ocupado o en suspenso este alienado cerebro mio. Es por esa causa que el dia de hoy comparto con ustedes un trabajo sobre el cine en Colotlan en la voz del Sr. Luis Navarro, que encontre entre mis archivos y que desconozco su autor, asi que alguien lo reconoce como propio con gusto pongo aquí sus creditos y le agradezco su esfuerzo.


El primer cine que hubo en Colotlan fue el del señor Lauro Martínez (+), y era todavia cine mudo. Después empezaron a llegar cines ambulantes pero esos ya no fueron mudos. Primero empezó a venir el cine Mundial, luego el cine de los Bugarin de Tlaltenango que se llamaba “Bremen”. Mas tarde tambien El Colonial y otros mas fueron el Olimpia, el Victoria y el Alcazar. En los cuarentas se surgio el cine Gloria, que era de gente de aquí de Colotlán. Los empresarios eran don Cuco Raygoza, Agustin de Ávila chico, Carmen Jara y don Lupe de León. Las primeras exhibiciones tuvieron lugar en mesón “Progreso”, que se ubicaba en la esquina de las calles Zaragoza e Hidalgo. En el patio del mismo se acomodaba los espectadores y en una superficie blanca se proyectaba la imagen. Otros lugares que hicieron función de salas fueron el “Mesón Puerto Arturo”, “Mesón de la Palma”, “Mesón de la Aurora” y “La Plaza de Toros la Concordia”, (después llamada “El Progreso”). Eventualmente se ofrecían funciones en Acaponeta y algunas otras calles del pueblo.


Yo anduve trabajando una temporada en el cine Bremen, íbamos a dar función a Sánchez Román y a Monte Escobedo junto con Juan Santa Cruz y el operador . Nomás me acuerdo que andábamos en el cine y que algo aprendi asi que ya después cuando empezó aquí el cine Gloria, nos dieron chamba a Santiago mi hermano y a mi. Alli en la plaza de toros era donde se alojaba el cine Gloria y también el cine Mundial y cuando venia, tambien el Colonial, que era una o dos veces por mes.

En aquellos tiempos operábamos con dos aparatos, cuando se terminaba un rollo ya estaba listo el otro, ya nomás para apachurrarle, así que era un trabajo rápido, sin intermedios. Solo los había cuando se reventaba alguna cinta, en lo que tardábamos en pegarla y recorrerla. Los aparatos duraban trabajando dos horas, que era lo que tardaba en recorrer las cintas. Se proyectaba una solo pelicula y se cobraban cinco centavos por entrada. La plaza de toros se llenaba a reventar en cada funcion. El cine Gloria que tenia unos aparatos muy grandes,requirio que colocaron en el piso dos vigas para sostener la enorme pantalla en que se proyectaban las imagenes.

De todos esos cines el unico que sobrevivo hasta hace unos pocos anos fue el cine Colonial, una empresa regional que ha trabajado durante varias décadas aquí en Colotlán, y parte de la región Norte de Jalisco y varios lugares de Zacatecas tales como: Jalpa,Ttlaltenango, Frasnilo, Huanusco, Villa Nueva y Juchipila, entre otros y ademas salían hasta Torreón, Coahuila. Los dueños del cine Colonial eran de la ciudad de Zacatecas, don Bonifacio Espinoza y J. Ignacio Espinoza.

Al hablar del cine Colonial se debe mencionar al señor que trabajo durante mas de 50 años en este ramo, don Fernando Gándara Velasco. Personaje que nació en Colotlán, en julio de 1933, hijo primogénito de Justo Gandara y Consuelo Velasco. Desde muy pequeño don Fernando junto con sus hermanas, para ganarse la entrada a la funcion y el derecho a vender algunas golosinas durane la exhibicion, ayudaban en la limpieza y otras actividades previas, tanto a los representantes del cine Mundial que venia de Mexticacan, Jalisco , como los del cine Alcázar. Los ninos Gandara con las ganacias del pequeño negocito ayudaban al sustento familiar.

El cine de ese tiempo era muy divertido, asistía todo tipo de publico, al principio el espectáculo era mudo y en blanco y negro, posteriormente apareció el sistema sonoro y finalmente el cine a todo color. Las funciones eran de noche porque el lugar donde se proyectaba el cine era a patio libre y estaban expuestos a los cambios del clima, por lo que las personas sobre todo las mayores se llevaban cobijas y llegaban con su silla en la cabeza a escoger su mejor localidad y disfrutar del espectáculo o ya de plano escogian su piedra. En ese tiempo (décadas de los 30´s, 40´s y 50´s) asistir al cine era como acudir a una gran fiesta donde las muchachas iban recién bañadas, con sus mejores ropas, y en donde asistían todas las clases sociales; las de la clase alta, desde temprano mandaban sus sillas para apartar los mejores lugares y había quien no llevaba donde sentarse y veía la función parados o en alguna piedra que estaba por ahi; el costo de la entrada al cine era de 5 centavos.


En el exterior del local había personas que vendían cena y bebidas; había mucho comercio. Se recuerda entre esos comerciantes a la señora Maria Luisa que vendía tacos, pozole y también don Cosme Guzmán con la venta de vino, refresco y cerveza. Los Gandarilla ayudaban en algunas de las actividades preparatorias a las funciones de los cines, tambien vendian algunas mercaderias, y a veces el cansancio los rendia y se quedaban dormidos en el suelo o recargados en una piedra y no faltaba el malora que les escondiera su canasta o les robara sus semillas. Conforme fue pasando el tiempo y don Fernando Gandara con trabajo, disciplina y tezon fue ganándose la confianza de los propietarios y ascendiendo de puesto en la empresa del cine Colonial; desde cargador hasta llegar a ser el gerente de esta empresa en Colotlán, cargo en el que se perpetuo hasta el dia en que la feroz competencia de los videocentros, alejo a la poblacion del cine e hizo que cerrara sus puertas definitivamente esta empresa. “Nunca fueron las cosas faciles” rememora don Fernando Gandara Velasco, quien en un principio y por necesidades económicas, alternaba su trabajo del cine con actividades del campo y trabajando con el pico y la pala cuando se construyo la carretera de terracería que nos comunico a Zacatecas.


Los proyectores de cine ambulantes que se utilizaban en aquella epoca, eran ligeros, tenian una base para sentar el proyector y poder recorrerlo para enfocarlo a la pantalla, se componia tambien de una linterna o faro y los magazines donde recorría la película, ademas de una caja con varios contactos para alimentar de electricidad los diversos aparatos del sistema: equipo de sonido, proyector, alumbrado del local, rectificador. Habia tambien unos cajones de madera en los que guardaban las películas y que eran armables. El aparato requería de permanente cuidado pues la proyección misma generaba calor y la planta electrica apenas era suficiente. Uno o dos trabajadores de la empresa debían estar listos con agua para mantener la temperatura adecuada y evitar interrumpir de repente el espectáculo. Tiempo despues el equipo proyector se modernizo, por lo que los operarios o cacaros como los conocia la gente, tuvieron que ir a la ciudad de Zacatecas a capacitarse en la operaracion del nuevo proyector.

En aquel tiempo era en cine colonial ambulante, ya que viajaba en diversos carros de la empresa colonial y seguían una ruta. El camión era cerrado y a los costados tenia la propaganda de las funciones, el nombre de la empresa por todos lados era llamativa, Alli viajaba el operador del proyector, el que vendía los boletos y el que los recogía a la entrada de la función. En ese tiempo había varias películas del gusto del publico, pero las mas taquilleras eran “Juan Charrasqueado”, “La Feria de las Flores”, “Jesusita en Chihuahua”, “Nosotros los Pobres”, “Ustedes los Ricos”, “Adiós Mariquita Linda”, y “Guitarras de Media Noche”, entre otras. La primera película a colores que se presento fue: “¡Ay! Jalisco no te rajes”, que la protagonizo Jorge Negrete, Maria Félix y Evita Muñoz.

En los primeros tiempos del cine, cuando aun la gente no conocia bien este medio sucedieron cosas un poco chuscas, por ejemplo se menciona que cuando llevaba al cine a las zonas rurales, era tanta la emoción de las personas que la pantalla que era de cuadricula resultaba perforada por algunas balas que los señores tiraban a los villanos de la película, algunos otros intentaban huir ante la evidente embestida de animales o vehiculos. También sucedía que algunas personas que no podían pagar la función, se subían a los árboles y a las azoteas cercanas para ver el espectáculo gratis, ya que eran los patios, la calle, o lugares amplios los que se adaptaban para brindar esta diversión para toda la familia.

Fue en los años cincuenta que se adecuo un lugar exclusivo para la sala de exhibicion del cine Colonial, se compro el local que había sido el cine Lux ,al señor Carlos de León. Inmueble que al principio era solo un jacalón con muros bajos y techo de cartón. Posteriormente se fue acondicionando con muros altos, con techo de lámina galvanizada, bancas de madera y sillas. Después llego la ventilación, los baños y el mueble fijo. El cine llego a contar con 600 butacas. Las personas que trabajan ahí eran: el gerente, el operador del proyector, el taquillero, la persona que recogía boletos, el encargado de la venta de alimentos y golosinas y el responsable de la limpieza. La publicidad se realizaba con spots radiados desde la azotea del mismo cine, que contaba con varias bocinas en dirección de los cuatro puntos cardinales de la ciudad, y desde donde se dejaba escuchar una potente y familiar voz, promocionando las peliculas a presentarse en el dia, una vez a mediodia y otra antes de la funcion. Ademas en dos puntos estrategicos del centro del poblado, se colocaban los cartelones alusivos a las peliculas en exhibicion. La marcha de Zacatecas, era la senal de que la funcion estaba por comenzar y que habia que apurarse para llegar a tiempo. Don Fernando Gandara recuerda con emocion los buenos tiempos del cine que eran preciosos, se trabajaba con mucho gusto y con entusiasmo disfrutando a la par con el público del ambiente tan agradable que se vivía.



El cine desde sus inicios tuvo una gran demanda y cada época tenia sus características. Hablar del cine colonial es hablar de una gran fiesta, donde participaba el publico apoyando al protagonista de la película y molestos con los villanos, si la función era para niños, a la otra de la emoción de la película en coro gritaban aplaudían, era tanto el gusto o la molestia que todo el publico lo manifestaba de diversas formas.La gente se divertía muchísimo ya que no existía otra distracción, era tiempos en queno había tanta libertad ni vicios.

En sus inicios los días de cine eran jueves y domingos. Pero a partir de mediados de los años 70´s las funciones eran martes, jueves, viernes, sábados y domingos.

Los martes tocaban a las películas norteamericanas exhibirse. Los jueves y domingos los estrenos nacionales, el viernes el clásico dos por uno en el cual las películas solían ser en blanco y negro. Y los domingos en la manana los ninos podian disfrutar de la funcion infantil, con “el Gato con botas” y cualquier otra pelicula de los idolos del ayer.
Sobre las tarifas, lo que se recuerda es de una entrada de 5 centavos, luego de 10 centavos, después de 15 centavos y así sucesivamente hasta llegar a un costo de 10 pesos por persona en las ultimas funciones.

La función de cine se presentaba de la siguiente manera. El cine colonial anunciaba su espectáculo con la marcha de Zacatecas, esta se tocaba media hora antes de la función y otras piezas de música; entre cada melodía se avisaba la función con cierto estilo particular del encargado. Cando era la hora de comenzar la función se tocaba de nuevo la marcha de Zacatecas, era muy bonito como se veía caminar apresuradamente a las personas que acudían al cine en todas las calles aledañadas al mismo.

Los jueves y los domingos se llenaba tanto la sala que se contaba con sillas extras que se acomodaban en los pasillos porque no se alcanzaban lugar las personas que llegaban poco tarde. La parte superior del cine era el preferido por las parejas de novios de la ciudad.

Se exhibían dos películas en cada función con una duración de hora y media cada una y un intermedio de diez minutos, en el cual se aprovecha para cambiar el rollo de la película. Se anunciaban las próximas películas y el auditorio aprovechaba para ir a comprar alguna golosina o gorditas, las que dicho sean de paso eran famosas por lo extremadamente ricas y picosas. Una vez que se reiniciaba la pelicula habia que estar precavido a la lluvia de platos voladores que se desataba despues que los cineastas habian saciado su hambre y que se iluminaban al pasar por el haz de luz del proyector, para ir a impactarse en algun cinefilo desprevenido. La segunda pelicula generalmente era la mejor.

Con la introducción del video hacia mediados de los ochentas empezó la decadencia del cine. El cine de sala de exhibicion dejo de existir en Colotlan porque no se obtenía los gastos de permisos, películas, gastos de mantenimiento y para pagar a los trabajadores.

-El cine en Colotlán se acabo totalmente.- Menciona con tristeza don Fernando Gandara.- Se terminaron los tiempos de fiesta del cine Colonial, ya no es costeable mantenerlo ya que no se saca ni para pagar al operador mucho menos para la propaganda. La ultima función oficial del cine fue el tres de octubre de 1999, y el cine esta cerrado por el momento y la persona que paso toda su vida en el, se ha retirado de la empresa. Con cierta melancolía menciona que el cine representa “ el espectáculo mas hermoso”.

Es difícil reactivar el cine Colotlán ya que por el momento no hay quien se interese en invertir una fuerte cantidad para modernizarlo a los requerimientos actuales.

Este, que se ha denominado el séptimo arte, también se incluye dentro de los aspectos culturales de nuestra ciudad. El espectáculo del cine mudo data de los principios de siglo aunque su mayor apogeo fue hasta los años 40´s en que se empezaron a proyectar las primeras películas de cine sonoro.

Thursday, June 2, 2011

Nuestra gente





Los seres humanos somos gregarios por naturaleza, aunque cuando a veces se nos olvida o preferimos rodearnos de gente de nuestra misma edad o condiciones, en nuestros dias hemos llegado a ser tan negligentes con la gente de edad, como nuestros abuelos, que sin saberlo estamos perdiendo una de las mas gratas experiencias de la vida, convivir y aprender de las personas que vivieron otras epocas y experiencias y que en si mismas son un caudal de aventuras, historias e ideas distintas. Ellos te aportan muchas cosa y aprendes cosas muy importantes además aprendes del optimismo y empuje que ellas aun tienen, cuando uno a veces se vence tan facilmente al primer problema, ellas perseveran y alcanzan sus metas.

Las entrevistas aquí presentadas, fueron realizadas a un grupo de mujeres de la tercera edad del DIF de Colotlan en 2004, estas señoras asistian los martes y miércoles de cada semana a las instalaciones del DIF para realizar unos trabajos realizados con pintura en tela, y aparte para platicar y así distraerse un poco.

Cundo uno les pregunta algo contestan con todo gusto, pues así recuerdan sus años de juventud y demás anécdotas que para ellas fueron divertidas y para nosotros resultan interesantes.
A cada una se les formularon las mismas preguntas; obteniendo distintas y similares respuestas. Preguntas como:

 ¿Qué recuerdan de los festejos religiosos que se llevaban a cabo?
 ¿Saben que eran los papaques?
 ¿Participaron en alguno? Si, no ¿Por qué?
 ¿Que comidas hacían distintas a las de ahora?
 ¿recuerdan los sucesos de la Guerra Cristera? si, no ¿Cuáles?
 Sobre su infancia.
 Su familia.
 Y los oficios de su familia.

NOMBRE: NATALIA LEAÑOS GARCÍA.

EDAD: 77 AÑOS

Integrante de l grupo de la tercera edad DIF Colotlan y reina de la tercera edad del año 2001.

TRADICIONES:” RECUERDOS DE LA INFANCIA”.
Recuerda festejos religiosos, fiestas a los santos de cada iglesia del lugar, a San Nicolás, San Luis, y San Lorenzo.
Cuando era día de cada santo lo festejaban con danzas. Las danzas que realizaban para los festejos religiosos eran casi iguales a las de hoy en día, con una diferencia, de que antes una ardilla, conejo o una zorra muerta, esto era porque cubrían largas horas de estar danzando y en la panza de los animales llevaban una botella con tequia, llevaban también un muñeco de aserrín y se lo metían a las personas que estuvieran descuidadas. Las misas en días santos no podrían faltar, y por supuesto la venta de comida en ese día.

VIDA COTIDIANA:
Iba a sembrar desde muy chica con su padre, para llegar a al parcela se subían a un burro para que no se cansara, la yunta era toros, aparte de que la subían en el burro para que no se cansara, era porque a ella le gustaba subirse a los burros desde muy pequeña; incluso los montaba se fuste, y nunca la tumbaban. Cuando no iba con su papa a sembrar le tenía que ayudar a su madre a hacer la comida para luego llevarles a la parcela; todo lo anterior era en tiempo de lluvias, pero en las otras temporadas le ayudaba a su mamá en la casa en todo, pero especialmente en el cuidado de sus nueve hermanos.



PAPAQUES:
Recuerda que eran bromas que hacían a algún amigo el día de los inocentes, en la cual le pedía algo a una persona, después de que se los daba le decían: “linda palomita de dejaste engañar”, pero después el objeto o dinero prestado se regresaba, con motivo a esto s hacia una fiesta y eran los papaques.

PRIMEROS ROMANCES:

Como era no le permitía tener novio su padre argumentaba que era muy chica para andar con esas cosas, pero a ella no le importaba lo que se padre le decía, en cuanto a romance se refiriera, así que ella y su novio se escribían cartas y acordaban dejarlas en algún lugar para luego tomarlas de ese lugar; eso era en la rama de un árbol, debajo de una pierda etc.

FAMILIA: mi abuelo, mi padre y mis hermanos más grandes cuidaban ovejas


NOMBRE: MARIA DEL CARMEN VILLAREAL
EDAD: 70 AÑOS

Integrante de l grupo de la tercera edad DIF Colotlan.

INFANCIA: pues recuerda que era una niña muy inquieta como cualquier otra, pero cuando empezó a crecer le gustaban mucho las fiestas, insistía tanto que sus padres tenían que acceder, recuerda que se iba en burro, a ella no le importaba que estuviera lejos, ni como estuviera el tiempo el caso era asistir a las fiestas.


Recuerda cuando su papá la llevaba a sembrar maíz y después a despencar cacahuate. Cuando no iba con su papá, mas tarde le tocaba y a llevar de comer a los sembradores.

COMIDA: en su casa comían muy rico, “digo que comíamos muy rico porque a mi me encantaba lo que mi mamá preparaba”, comían chilaquiles, jocoque, frijoles, chile hervido; (jocoque, queso y chile verde), papas, era lo que regularmente comían y a ella le gustaba muchísimo.
Como postre decía ella que se subía a los mezquites a cortar unas bolas que salen en estos árboles, llamadas gomas, son transparentes y no siempre, solo algunas veces son dulces.

PAPAQUES:
Dijo que eran fiestas realizadas a algún inocente, que eran muy bonitas, en ellas los muchachos quebraban cascarones de huevo a las muchachas, en signo de que las muchachas les gustaban.

SU FAMILIA:

Su papá fue siempre un hombre muy emprendedor cultivaba todo tipo de vegetales, engordaba marranos, ordeñaba vacas y hacia queso, elaboraba mantequilla, todo esto para el sustento de la familia. Recuerda también que su mamá la mandaba a comprar algo, cualquier cosa hasta con diez centavos.
Su mamá ayudaba mucho a su papá con la ordeña de las vacas y la elaboración del queso, pero aparte hacía el quehacer de la casa y se encargaba del cuidado de sus hijos. Era un trabajo difícil para su señora madre, pues eran doce hijos.




NOMBRE: ANTONIA MARQUEZ.

Integrante del grupo de la tercera edad del DIF Colotlan de pintura en tela y del grupo de danza de la tercera edad del DIF.


GUERRA CRISTERA:
Al la llegada de los federales, tenían atemorizada a mucha gente porque entraban a saquear las casas y en aquella que encontraban imágenes religiosas las destrizaban y el que dijera ser católico lo mataban. A veces los mataban sin esperar explicaciones, lo hacían a sangre fría.
Por otro lado los cristeros quemaban cosecha, las casas, se robaban a las muchachas para hacer con ellas lo que se les venía en gana. Pero no solo hacían eso antes mencionado, sino que saqueaban las casas haber si encontraban dinero.

Panchita Jaimes que pocos años atrás era monja de un convento de zacatecas, le platico hace mucos años le platico a ola señora Antonia cosas muy interesantes,
Panchita Jaimes que ella fue ayudante de los cristeros ella les proporcionaba todo lo que ellos necesitaran, claro proporcionadas por otras personas.

Recuerda un caso muy sonado, la muerte de un señor llamado Nicolás, no recordó el apellido, originario de las cañas Jalisco, durante su vida, el emprendió la construcción de una capilla en ese mismo lugar, esta construcción quedo hasta las ventanas por que en ese tiempo lo mataron los federales por el hecho de su devoción hacia la virgen de Guadalupe, porque para ella era la capilla, hasta la fecha la construcción sigue igual. También en ese mismo año que tampoco recordó, mataron a un sacerdote de apellido Montoya, por su profesión.
NOMBRE: TERESA ALVARADO.

GUERRA CRISTERA:
Tenía muy en cuenta pláticas de su padre, que le decía que los cristeros se robaban a las muchachas. Recuerda lo que le platicaba una señora llamada Leopoldina Ávila, cosas que le pasaron e a su familia durante la guerra cristera. Ella le platico que sus padres se llevaron a sus hermanas y a ella para una cueva llamada cueva del meco hay se estuvieron varios días, para así evitar que los cristeros se las robaran.
También le platicaron que en es tiempo reclutaban a cuanto muchacho se encontraban en la calle, y aquel que no quisiera irse con ellos, en ese mismo instante lo mataban.
Recuerda también que en 1925 cerraron los templos, con que fin no lo sabe, lo único que se acuerda es que decían que el gobierno los había cerro.

NOMBRE: SILVINA GAETA RODRIGUEZ.
EDAD: 77 AÑOS.
Integrante del grupo de la tercera edad, y princesa de la tercera edad 2004-2005.

FESTEJOS RELIGIOSOS:
Se realizaban con danzas y misas, las danzas son iguale a las de ahora, pero antes había muchas más, había unas muy famosas que era la de los lares, y otra que la gente decía que de Maria chicotes.

COMIDAS:
Lo mas elegante y rico que podía presentar una familia a sus invitados era el pipían.



PAPAQUES:
Eran fiestas muy bonitas, y cantaban estos versos:


En el nombre sea de dios y de la virgen Maria que dios nos ha dado licencia para llegar a este día.

En nombre de dios comienzo a pintar un ángel bello desde la punta del pie hasta el ultimo cabello.

En el quicio de esta puerta el pie derecho pondré a los señores caseros buenas noches les daré.

Hoy les doy las buenas noches y mañana buenos días glorioso san Sebastián que trajo las alegrías.

Arrímense compañeros todos los de mi cuadrilla ayúdenme a festejar esta rosa de castilla.

Oiga usted señora donde esta que no aparece cada vez que usted se asoma todo el mundo resplandece.


Este patio esta rendido con cien varas de listón en cada esquina una rosa y en medio mi corazón.

Llegaron las señoritas muy cagadas de razones untando su pinolillo y quebrando sus cascarones.

Que me voy que no me voy que me voy para san Blas ya estamos como los burros y todavía queremos más.

Ora si me revolcaron me dejaron como un burro pro llegando a mí casa me hago el pelo y me rasuro.

Vamos a santa Maria acortar flores para hacerle su corona a Jesús de Nazareno.

Despídanse de la carne también de la longaniza porque nos esta llegando el miércoles de ceniza.



De tlaxcala yo he venido de tlaxcala para allá jugar cristolienda al uso de por allá.

Que me voy que no me voy que me voy pa la barranca mis compañeros y yo todos con la cara blanca.

Óigame don o doña cero que debo recordar que el 28 de diciembre nada debe prestar.

Dejaremos los papaques que no es tierra de anolar que nos toquen una pieza para salir a bailar.


Los versos describen comieran las fiestas, que se hacía y porque.


SU FAMILIA:
Su abuelo era alfarero, su padre cultivaba toso tipo de hortalizas.
SU INFANCIA: dice que los juegos de antes le parecían tan sanos, ella jugaba tan a gusto con sus amiguitos, jugaban a los encantados e las canicas al trompo, juegos que ahora casi ya no se ven.


PRIMEROS ROMANCES:
Por ese lado ella dice no haber tenido problema, porque ella vivió un tiempo en Torreón pizcando algodón y compañeros de trabajo eran sus novios, la pizca duraba desde agosto y hasta septiembre del año entrante así que trabajando veía al novio.



SE EXPERIENCIA COMO PRINCESA:
Su experiencia como princesa de la tercera edad es muy bonita, porque sintió el apoyo de sus compañeras que la invitaron y la apoyaron a participar.



NOMBRE: ROSA SALAZAR ROSALES.
EDAD: 80 AÑOS.
Integrante del grupo e la tercera edad DIF Colotlan.

SU VIDA:
Quedo huérfana a los nueve años, y de ahí en adelante se dedico a trabajar, ayudando en casas a lo que sus cortos años le permitían, antes de irse a la escuela ya les había ayudado a sus hermanas al quehacer de la casa, y cuando salía de la escuela se iba a trabajar. Ella hubo cuatro hermanas y un solo hermano que desapareció un año después de la muerte de sus padres, y jamás volvieron a saber de el.

PAPAQUES: le gustaba asistir a esas fiestas aunque nunca le toco ser el inocente que le hiciera la broma, los muchachos les quebraban casarones de huevo llenos con harina y eso a ella no le gustaba.

COMIDA:
“comíamos de todo lo que podíamos comprar, frijoles, sopa, papas etc.”

GUERRA CRISTERA:
Dijo recordar que su padre los alertaba cuando los cristeros iban llegando, ellos en cuanto escuchaban la alerta de su padre, se escondían en los gallineros de los corrales de su casa.
“si le platico todo lo que se ya sería muy repetitiva, pero todo lo que mis compañeras le han dicho es cierto.”






NOMBRE: AMANDA VALDES DEL REAL.

Integrante del grupo de la tercera edad DIF Colotlan.

GUERRA CRISTERA:
Ella vivía en el alto de monte Escobedo, tenía como siete años, cuando se vino a vivir para Colotlan, en 1935 había a una maestra en canoas la cual organizaba quermés para sacar gastos de la escuela. En una ocasión estaban en plena quermés cuando llegaron los cristeros preguntando por la maestra luz curiel, ella se presento con ellos, y ellos al instante le dispararon, porque decían que enseñar a los niños no era bueno y ella los había estado desobedeciendo.

PAPAQUES:
Son fiestas de carnaval que en realidad nunca le gustaron mucho, pero asistía porque la invitaban.

NOMBRE: GRACIELA MONTOYA DE ROJAS.
EDAD: 68 AÑOS

Integrante del grupo de pintura en tela y del grupo de la tercera edad del DIF de Colotlan.

SU VIDA:
Sus padres se casaron en 1916, año de la guerra del hambre.
Su padre: Victoriano Montoya M.
Su madre: Aurelia de Rojas.
Su padre era un fiel seguidor de la iglesia, el encabezaba festejos religiosos de todo tipo pero en especial, festejaba el día de la santa cruz, incluso el empezó a organizar bailes y rodeos de paga para solventar gastos de la iglesia de monte Escobedo.

Por su devoción a la santa cruz, hizo penitencia de cargar una pesada cruz de corazón de mezquite, desde monte Escobedo y hasta san bartolo.
Su padre era albañil y el hacia trabajos gratis para la iglesia del lugar y nunca obtuvo a cambio nada. Ella después de casarse se vino a vivir a Colotlan, tuvo 13 hijos.

NOMBRE: MARIA DEL REFUGIO AVALOS.

Integrante del grupo de pintura en tela de la tercera y también del grupo de danza del DIF y actual reina de la tercera edad 2004-2005.

SU EXPERIENCIA COMO REINA:
TESTIMONIO:
Bueno pues yo me decidí a participar por el apoyo de mis compañeras y de toda mi familia, incluso mis familiares de estados unidos me hablaron para felicitarme por haber aceptado participar, y luego que ya gane por haber ganado.
Estoy muy contenta por la respuesta de mi familia. Hasta horita e participado en varios eventos donde me han hecho sentir muy bien y yo estoy muy contenta de poder representar a la tercera edad de Colotlán.



Por: G E G C.