Wednesday, June 30, 2010
Monday, June 28, 2010
Pedro Macias Orozco
Don Nicolás Orozco, fue mi abuelo materno y fue talabartero y fue él quien enseño el oficio a los principales talabarteros de Colotlán: entre ellos don Cruz Fernández y Refugio Ortega. Él siempre tuvo talabartería con muchos oficiales, ocho o diez. Su última talabartería estaba ubicada por allí, donde fue el hotel México, y donde después fue la casa popular. Mi abuela se llamó Maria Guadalupe del Real. Mis abuelos venían a nuestra casa a comer todos los domingos, después de cerrar la tienda, como a las tres de la tarde.
Mi papá fue ganadero, agricultor y comerciante, abrió su primera tienda un 17 de noviembre del año 1929, y yo nací dos días después. Durante mucho tiempo fue la mejor tienda en su tipo en Colotlán. Yo comencé a trabajar en ella a los diez años, en mayo de 1940, ya trabajaba yo allí y dure 40 años en ella. Allí se vendía de todo, era tienda mixta. Mi papa tenia una maquina para hacer fideo, y de eso me acuerdo, porque la maquina tenia un volante de 50-60 centímetros. Se subía uno a un banco para hacer el fideo. La maquina de fideos se la vendió mi papá a don José Ortega. Actualmente esa maquina la tiene Toño Díaz. Para 1940 ya no se vendían abarrotes, pero si vendíamos ropa, calzado y sombreros.
En un principio los ayudantes de mi papá en la tienda eran sus hermanos, Protacio y Maria Dolores, ya cuando creció mi hermano Uriel, era él quien le ayudaba. Mi hermano Uriel era 10 años más grande que yo, durante mucho tiempo estuvo al frente de la tienda, pero en 1944, Uriel salió a Aguascalientes y yo me quede al frente del negocio, Después de que se fue mi hermano nos ayudaba mi hermana y Nicolás. Mi papa siempre estuvo allí, nos enseñaba y nos dejaba entendernos del negocio. Entonces se usaba vender mucha tela para hacer toda la ropa, entonces no había mucha ropa hecha, tela para toda la gente: mezclilla, manta, se vendía mucho la bagueta roja, la bagueta es como el paño de lana ahora, las mujeres la acostumbraban mucho para sus chomités, que lo usaban debajo del vestido como especie de fondo. Después crecimos en el negocio vendiendo línea blanca, estufas, camas colchones y refrigeradores.
La gente entonces vestía bien con traje y había sastres muy buenos don Domingo Ruvalcaba era especialista en hacer trajes, en la tienda vendíamos casimires muy buenos, de pura lana. Vendíamos calzado fino, había zapateros en Colotlán que hacían zapato fino, cosido a mano. Entonces todo era hecho a mano. Fuimos distribuidores de Good Year Oxo. Cuando nos quemaron la tienda, mucha mercancía que aun quedaba de la tienda se consumió en el incendio.
Esta fue región eminentemente de toros y toreros, mucho antes que hubiera charros, festejamos la fiesta brava, mi papá vivió y platicaba mucho de cuando estuvo aquí la zona militar, y que hubo la revolución que estuvieron aquí el general La Carra y el General Quintero, en ese tiempo había muchos soldados y los jefes militares les pedían toros a los hacendados y rancheros de la región: Huacasco, Laurel, Hepazote, San Pedro, Tortugas. En aquellos tiempos había ganado bravo, yo pienso que por tradición traían sementales con los que se formaban las ganaderías bravas. En todos los ranchos grandes y las haciendas había toros bravos, para torearse muy buenos. Los jefes militares formaron una cuadrilla, y había toros cada ocho días. Les exigían cuatro toros a cada propietario de hacienda o rancho importante. La carne se la comían los soldados en la semana. En esa cuadrilla participaron don Lauro Felguerez, don Juan Antonio Díaz, Alberto Macias y don Jesús de Santiago. Ellos eran los picadores, salían dos de ellos cada domingo. Yo por mi edad, vi picar a mi papá solo dos veces. Don Felipe Sánchez era matador de toros, también don Ramón, que era fotógrafo. Yo me hice de un muy buen estoque por conducto de mi tía Toña Macias, que era comerciante, maestra y había formado la típica, un ensamble musical de mucha calidad. Daniel Ortega y yo somos primos segundos porque mi abuela doña Maria Guadalupe del Real y doña Paula del Real, la abuela paterna de Daniel, mamá de don José eran hermanas. Conchita y Daniel los más grandes de la casa, se venia a pasar los domingos a nuestra casa. Comíamos y nos íbamos al catecismo, nos veíamos como hermanos. Un día Daniel me pidió regalado el estoque. Después él se lo regalo un amigo suyo compadre de Eloy Cavazos. Daniel le pidió a cambio un estoque nuevo de Toledo. La afición taurina nos alcanzó también a nosotros y formamos una cuadrillita que se presentaba en los festejos importantes del pueblo, pero no matábamos a los toros, nada más los toreábamos y banderillabamos.
Hay un programa de 1930, donde toreaba Marcos Ruvalcaba, ese programa lo tenia el original don Julián Sánchez. Así como “El Rondo”, hijo de Chana Ruiz, y hermano de Emma y Guillermina Ortega. Esa cuadrilla es anterior a la nuestra. Colotlán era entonces un centro importante de la fiesta brava, afición que se fue desluciendo con los años. A mi me llevaban hasta en brazos a los toros y sigo fiel a esa tradición. Recientemente cumplí 55 años de asistir a la fiesta de San Marcos a los toros. La poca afición de aquí que quedaba, se termino cuando tumbaron la placita donde esta hoy el Centro Social. Con el Lienzo Charro la afición por los deportes bravíos ha aumentado.
En el año de 1943, el teniente coronel, Dr. José León Oropeza, formó una sociedad para traer a Conchita Cintrón , se juntaron cien socios, de aquí de Villa Guerrero, Totatiche, Santa Maria, Huejucar, cada uno de a 100 pesos. En esa ocasión llovió y no recuperaron la inversión. Después en mayo volvieron a traer a Conchita Cintrón, pero ya solo cuatro socios y el teniente coronel. Se ponía una gradería de madera que salía hasta media calle de la plaza. En aquel entonces la madera era muy difícil de conseguir. El teniente coronel que era el amo dela región se traía la madera sin ningún problema forestal. Mi papá era el que contrataba con los toreros y con Conchita y había que proporcionarles lo que ocupaban. Donde hoy es el hotel San Luis era la casa de mi tía Cleotilde, allí dejaban los caballos. Mi papa era el contratista como empresario. Conchita la mayor parte del tiempo la pasaba con mis tías. En esta ocasión llovió también en mayo, y la gente no fue y se perdieron cinco mil pesos, en lugar de tres mil novecientos. Así fue el asunto de los toros.
En el tiempo del herraje de los toros, la gente ayudaba mucho y mi papá sabía mucho de ganado, llegamos a tener hasta ciento cincuenta becerros de nacencia en los tres ranchos. San Pascual, la Hierbabuena. Los sementales daban toros manos o menos buenos para torearse, y entonces llevaba yo a mis amigos al herradero, a José Dávila la Bastolia, después trabajar de herrar y vacunar, toreabamos toda la tarde o toda la mañana. Hubo toreros muy buenos Manuel Valdez, Toño Sillas, Raúl Flores, “el Cachito" . La Becerra, Fernando Gallegos. Don Jesús del Real, era muy buen torero. A medida de la plaza siempre se llenaba. Ellos eran una generación muy anterior. Nosotros toreamos desde el año 55 hasta el 68. En el año de 1959 para las reinas patrias, se sacaban tres candidatas y la reina se elegía con dinero. La Comisión Federal de Electricidad, quería $55,000 de cooperación para la electrificación del poblado. Yo fui casi el fundador del TPCH, y en ese año nos dieron una candidata, otra se la dieron a la presidencia y la otra a la comisión contra el paludismo, que estaba aquí la base regional.
Nosotros trabajamos mucho en esa campaña, el presidente del comité era un Lic. que estaba de Ministerio Publico, también muy aficionado a los toros, yo era el tesorero, hicimos muchos bailes y actividades finalmente ganamos la elección y sacamos a nuestra candidata, Polencho Vázquez. Sacamos mucho dinero para la electrificación. Cinco o seis años estuvimos toreando. Yo tenía los contratos de Conchita Cintrón y de los principales toreros, entre ellos Ricardo Balderas, que vino de novillero aquí, sobrino de Antonio Balderas. En ese incendio de la casa se quemaron todos esos documentos.
El TPCH, estaba formado ente otros por: Agustín Olague, Raúl Vázquez, Tereso Gandara, Daniel Ortega, Nicolás Macias, Pedro Macias, Fabio Ruiz, Daniel Navarro. En el año de 1959 estaba en su apogeo. Nos juntábamos toda la palomilla, de hombres y de mujeres, en la cenaduría de Chilo Ramos. Las mujeres formaron el Club Violeta y los hombres el TPCH. Incluso se mando hacer un estandarte.
Mi papá nació en Santa Maria de los Ángeles, mi tío Felipe ya nació aquí en Colotlán. Ellos fueron seis de familia: Cleotilde, Toña, Alberto, Lola, Protacio y mi tío Felipe. Mi papa quedo huérfano de mamá de seis años y de papa de doce. Ellos salieron adelante, ellos eran muy trabajadores. La más rica de entre ellos fue mi tía Toña. Ella compro la hacienda del Hepazote. Ella les presto dinero a mi tío Felipe y a don Gustavo Sánchez, dueños de la hacienda de Santa Maria, ella les presto $20,000 pesos para comprar la hacienda, que se las había recogido el gobierno a los dueños por falta de contribuciones. Mi tía a su vez se las recogió a ellos, por que no le pudieron pagar. Entro el agrarismo, que tenia 11,000 y pico de hectáreas, y le dejaron tres mil hectáreas que no servían para nada. La hacienda les quedo a los hijos de mi tío Protacio. Mi papá nunca quiso que nos escriturara nada mi tía. Porque nosotros teníamos cerca de dos mil hectáreas de terrenos. Les quitaron las tierras hace muchos años, yo era muy niño. Cuando tenía doce o trece años yo llegue a ir la hacienda ya era de ellas. La hacienda le pertenecía a don Eusebio Barragán, su casa era don de esta la terminal, que era una casa muy bonita.
Mi tía toña a los diecisiete años era directora de escuela, tenia un carácter muy determinante y con mucha decisión. Ella inició con una escuelita para educar a mi hermano Claudio, Elia mi prima, Manuel mi primo y yo, así como la sirvienta que se llamaba Consuelo Enciso, mamá de Luís Arellano. A este grupito nos puso doce meses de escuela y nos enseño a leer, escribir, capitales, sellos aztecas. Entonces no había escuelas, estaba el pleito de la guerra cristera, la gente no quería mandar a sus hijos a la escuela, después dejo la escuela y puso una tiendita, enseguida de la carnicería de don Luís Humberto, ella vendía petróleo y gasolina, eran productos importados. Ella era la distribuidora. Ella le vendió la concesión a don José Ortega. Mi tía tenía muchos negocios y pleitos en el juzgado, ella misma contestaba las demandas. Cuándo murió tenia siete u ocho casas muy buenas. Era dueña del cine colonial, la casa del Restaurante la Hacienda, también donde esta Armando Pinedo, la del Dr. Aceves, la de Nicolás mi hermano, una en la Ramón Corona, otra que el dio a la sirviente a un lado de con Artemio González.
Mi tía Cleotilde era la hermana mayor, ella nació en 1898 y mi papá en 1894. Mi tía Lola fue maestra normalista que estudio en Lagos de Moreno, por aquella época aquí en Colotlán había una directora llamada Willibalda, con mucha visión y empuje, y probablemente fue ella, la que les ayudo a mis tías a ampliar sus horizontes y buscar mejores condiciones. Esto fue durante la época de la escuela socialista y los papás no enviaban a sus hijos a la escuela, y evitaban todo trato con el gobierno. Por esta causa mi hermana Maria y yo nos registramos hasta el año 1975, nunca habíamos sido registrados y no contábamos con acta de nacimiento. A mi hermana que nació en 1927, la bautizaron a escondidas, por allá por las huertas.
En 1952, se le ocurrió a mi padre Alberto Macias en sociedad con Cuco Ortega, hacer una presa sobre el arroyo de la tierra blanca, tres kilómetros arriba de San pascual el objetivo era regar unas treinta hectáreas de tierra. La casa de san Pascual la hizo mi padre para tener ganado, unas treinta vacas, caballos y bodegas para almacenar la cosecha. La presa se trono en el año 58, vino el problema de decepción porque se gasto mucho en hacerla y en reparar los daños que hizo. Nos quedamos descapitalizados, y la casa quedo abandonada, solo unas cuantas vacas que tenía mi hermano nos quedaron de aquel infortunio. En la aparte de abajo, en el arroyo de la tierra blanca, mi papá puso un capillita, y en uno de los pisos, dejo la forma para una capilla de tres naves, más grande para mi hermano el padre. Nosotros, la familia, los hijos, incluso mi mamá, nunca fuimos de la idea de que hiciera esa obra. Le decíamos haga un hotel, compre una casa en Guadalajara. Pero ese era su pensamiento. En otro rancho que tenemos también comenzó una casa grande que no esta terminada. El era de la idea de darle trabajo a la gente, pero su visión no fue para hacer negocio. Aquí en el pueblo nunca le gusto comprar casa, todas las que compraba las vendía.
Mi papá fue ganadero, agricultor y comerciante, abrió su primera tienda un 17 de noviembre del año 1929, y yo nací dos días después. Durante mucho tiempo fue la mejor tienda en su tipo en Colotlán. Yo comencé a trabajar en ella a los diez años, en mayo de 1940, ya trabajaba yo allí y dure 40 años en ella. Allí se vendía de todo, era tienda mixta. Mi papa tenia una maquina para hacer fideo, y de eso me acuerdo, porque la maquina tenia un volante de 50-60 centímetros. Se subía uno a un banco para hacer el fideo. La maquina de fideos se la vendió mi papá a don José Ortega. Actualmente esa maquina la tiene Toño Díaz. Para 1940 ya no se vendían abarrotes, pero si vendíamos ropa, calzado y sombreros.
En un principio los ayudantes de mi papá en la tienda eran sus hermanos, Protacio y Maria Dolores, ya cuando creció mi hermano Uriel, era él quien le ayudaba. Mi hermano Uriel era 10 años más grande que yo, durante mucho tiempo estuvo al frente de la tienda, pero en 1944, Uriel salió a Aguascalientes y yo me quede al frente del negocio, Después de que se fue mi hermano nos ayudaba mi hermana y Nicolás. Mi papa siempre estuvo allí, nos enseñaba y nos dejaba entendernos del negocio. Entonces se usaba vender mucha tela para hacer toda la ropa, entonces no había mucha ropa hecha, tela para toda la gente: mezclilla, manta, se vendía mucho la bagueta roja, la bagueta es como el paño de lana ahora, las mujeres la acostumbraban mucho para sus chomités, que lo usaban debajo del vestido como especie de fondo. Después crecimos en el negocio vendiendo línea blanca, estufas, camas colchones y refrigeradores.
La gente entonces vestía bien con traje y había sastres muy buenos don Domingo Ruvalcaba era especialista en hacer trajes, en la tienda vendíamos casimires muy buenos, de pura lana. Vendíamos calzado fino, había zapateros en Colotlán que hacían zapato fino, cosido a mano. Entonces todo era hecho a mano. Fuimos distribuidores de Good Year Oxo. Cuando nos quemaron la tienda, mucha mercancía que aun quedaba de la tienda se consumió en el incendio.
Esta fue región eminentemente de toros y toreros, mucho antes que hubiera charros, festejamos la fiesta brava, mi papá vivió y platicaba mucho de cuando estuvo aquí la zona militar, y que hubo la revolución que estuvieron aquí el general La Carra y el General Quintero, en ese tiempo había muchos soldados y los jefes militares les pedían toros a los hacendados y rancheros de la región: Huacasco, Laurel, Hepazote, San Pedro, Tortugas. En aquellos tiempos había ganado bravo, yo pienso que por tradición traían sementales con los que se formaban las ganaderías bravas. En todos los ranchos grandes y las haciendas había toros bravos, para torearse muy buenos. Los jefes militares formaron una cuadrilla, y había toros cada ocho días. Les exigían cuatro toros a cada propietario de hacienda o rancho importante. La carne se la comían los soldados en la semana. En esa cuadrilla participaron don Lauro Felguerez, don Juan Antonio Díaz, Alberto Macias y don Jesús de Santiago. Ellos eran los picadores, salían dos de ellos cada domingo. Yo por mi edad, vi picar a mi papá solo dos veces. Don Felipe Sánchez era matador de toros, también don Ramón, que era fotógrafo. Yo me hice de un muy buen estoque por conducto de mi tía Toña Macias, que era comerciante, maestra y había formado la típica, un ensamble musical de mucha calidad. Daniel Ortega y yo somos primos segundos porque mi abuela doña Maria Guadalupe del Real y doña Paula del Real, la abuela paterna de Daniel, mamá de don José eran hermanas. Conchita y Daniel los más grandes de la casa, se venia a pasar los domingos a nuestra casa. Comíamos y nos íbamos al catecismo, nos veíamos como hermanos. Un día Daniel me pidió regalado el estoque. Después él se lo regalo un amigo suyo compadre de Eloy Cavazos. Daniel le pidió a cambio un estoque nuevo de Toledo. La afición taurina nos alcanzó también a nosotros y formamos una cuadrillita que se presentaba en los festejos importantes del pueblo, pero no matábamos a los toros, nada más los toreábamos y banderillabamos.
Hay un programa de 1930, donde toreaba Marcos Ruvalcaba, ese programa lo tenia el original don Julián Sánchez. Así como “El Rondo”, hijo de Chana Ruiz, y hermano de Emma y Guillermina Ortega. Esa cuadrilla es anterior a la nuestra. Colotlán era entonces un centro importante de la fiesta brava, afición que se fue desluciendo con los años. A mi me llevaban hasta en brazos a los toros y sigo fiel a esa tradición. Recientemente cumplí 55 años de asistir a la fiesta de San Marcos a los toros. La poca afición de aquí que quedaba, se termino cuando tumbaron la placita donde esta hoy el Centro Social. Con el Lienzo Charro la afición por los deportes bravíos ha aumentado.
En el año de 1943, el teniente coronel, Dr. José León Oropeza, formó una sociedad para traer a Conchita Cintrón , se juntaron cien socios, de aquí de Villa Guerrero, Totatiche, Santa Maria, Huejucar, cada uno de a 100 pesos. En esa ocasión llovió y no recuperaron la inversión. Después en mayo volvieron a traer a Conchita Cintrón, pero ya solo cuatro socios y el teniente coronel. Se ponía una gradería de madera que salía hasta media calle de la plaza. En aquel entonces la madera era muy difícil de conseguir. El teniente coronel que era el amo dela región se traía la madera sin ningún problema forestal. Mi papá era el que contrataba con los toreros y con Conchita y había que proporcionarles lo que ocupaban. Donde hoy es el hotel San Luis era la casa de mi tía Cleotilde, allí dejaban los caballos. Mi papa era el contratista como empresario. Conchita la mayor parte del tiempo la pasaba con mis tías. En esta ocasión llovió también en mayo, y la gente no fue y se perdieron cinco mil pesos, en lugar de tres mil novecientos. Así fue el asunto de los toros.
En el tiempo del herraje de los toros, la gente ayudaba mucho y mi papá sabía mucho de ganado, llegamos a tener hasta ciento cincuenta becerros de nacencia en los tres ranchos. San Pascual, la Hierbabuena. Los sementales daban toros manos o menos buenos para torearse, y entonces llevaba yo a mis amigos al herradero, a José Dávila la Bastolia, después trabajar de herrar y vacunar, toreabamos toda la tarde o toda la mañana. Hubo toreros muy buenos Manuel Valdez, Toño Sillas, Raúl Flores, “el Cachito" . La Becerra, Fernando Gallegos. Don Jesús del Real, era muy buen torero. A medida de la plaza siempre se llenaba. Ellos eran una generación muy anterior. Nosotros toreamos desde el año 55 hasta el 68. En el año de 1959 para las reinas patrias, se sacaban tres candidatas y la reina se elegía con dinero. La Comisión Federal de Electricidad, quería $55,000 de cooperación para la electrificación del poblado. Yo fui casi el fundador del TPCH, y en ese año nos dieron una candidata, otra se la dieron a la presidencia y la otra a la comisión contra el paludismo, que estaba aquí la base regional.
Nosotros trabajamos mucho en esa campaña, el presidente del comité era un Lic. que estaba de Ministerio Publico, también muy aficionado a los toros, yo era el tesorero, hicimos muchos bailes y actividades finalmente ganamos la elección y sacamos a nuestra candidata, Polencho Vázquez. Sacamos mucho dinero para la electrificación. Cinco o seis años estuvimos toreando. Yo tenía los contratos de Conchita Cintrón y de los principales toreros, entre ellos Ricardo Balderas, que vino de novillero aquí, sobrino de Antonio Balderas. En ese incendio de la casa se quemaron todos esos documentos.
El TPCH, estaba formado ente otros por: Agustín Olague, Raúl Vázquez, Tereso Gandara, Daniel Ortega, Nicolás Macias, Pedro Macias, Fabio Ruiz, Daniel Navarro. En el año de 1959 estaba en su apogeo. Nos juntábamos toda la palomilla, de hombres y de mujeres, en la cenaduría de Chilo Ramos. Las mujeres formaron el Club Violeta y los hombres el TPCH. Incluso se mando hacer un estandarte.
Mi papá nació en Santa Maria de los Ángeles, mi tío Felipe ya nació aquí en Colotlán. Ellos fueron seis de familia: Cleotilde, Toña, Alberto, Lola, Protacio y mi tío Felipe. Mi papa quedo huérfano de mamá de seis años y de papa de doce. Ellos salieron adelante, ellos eran muy trabajadores. La más rica de entre ellos fue mi tía Toña. Ella compro la hacienda del Hepazote. Ella les presto dinero a mi tío Felipe y a don Gustavo Sánchez, dueños de la hacienda de Santa Maria, ella les presto $20,000 pesos para comprar la hacienda, que se las había recogido el gobierno a los dueños por falta de contribuciones. Mi tía a su vez se las recogió a ellos, por que no le pudieron pagar. Entro el agrarismo, que tenia 11,000 y pico de hectáreas, y le dejaron tres mil hectáreas que no servían para nada. La hacienda les quedo a los hijos de mi tío Protacio. Mi papá nunca quiso que nos escriturara nada mi tía. Porque nosotros teníamos cerca de dos mil hectáreas de terrenos. Les quitaron las tierras hace muchos años, yo era muy niño. Cuando tenía doce o trece años yo llegue a ir la hacienda ya era de ellas. La hacienda le pertenecía a don Eusebio Barragán, su casa era don de esta la terminal, que era una casa muy bonita.
Mi tía toña a los diecisiete años era directora de escuela, tenia un carácter muy determinante y con mucha decisión. Ella inició con una escuelita para educar a mi hermano Claudio, Elia mi prima, Manuel mi primo y yo, así como la sirvienta que se llamaba Consuelo Enciso, mamá de Luís Arellano. A este grupito nos puso doce meses de escuela y nos enseño a leer, escribir, capitales, sellos aztecas. Entonces no había escuelas, estaba el pleito de la guerra cristera, la gente no quería mandar a sus hijos a la escuela, después dejo la escuela y puso una tiendita, enseguida de la carnicería de don Luís Humberto, ella vendía petróleo y gasolina, eran productos importados. Ella era la distribuidora. Ella le vendió la concesión a don José Ortega. Mi tía tenía muchos negocios y pleitos en el juzgado, ella misma contestaba las demandas. Cuándo murió tenia siete u ocho casas muy buenas. Era dueña del cine colonial, la casa del Restaurante la Hacienda, también donde esta Armando Pinedo, la del Dr. Aceves, la de Nicolás mi hermano, una en la Ramón Corona, otra que el dio a la sirviente a un lado de con Artemio González.
Mi tía Cleotilde era la hermana mayor, ella nació en 1898 y mi papá en 1894. Mi tía Lola fue maestra normalista que estudio en Lagos de Moreno, por aquella época aquí en Colotlán había una directora llamada Willibalda, con mucha visión y empuje, y probablemente fue ella, la que les ayudo a mis tías a ampliar sus horizontes y buscar mejores condiciones. Esto fue durante la época de la escuela socialista y los papás no enviaban a sus hijos a la escuela, y evitaban todo trato con el gobierno. Por esta causa mi hermana Maria y yo nos registramos hasta el año 1975, nunca habíamos sido registrados y no contábamos con acta de nacimiento. A mi hermana que nació en 1927, la bautizaron a escondidas, por allá por las huertas.
En 1952, se le ocurrió a mi padre Alberto Macias en sociedad con Cuco Ortega, hacer una presa sobre el arroyo de la tierra blanca, tres kilómetros arriba de San pascual el objetivo era regar unas treinta hectáreas de tierra. La casa de san Pascual la hizo mi padre para tener ganado, unas treinta vacas, caballos y bodegas para almacenar la cosecha. La presa se trono en el año 58, vino el problema de decepción porque se gasto mucho en hacerla y en reparar los daños que hizo. Nos quedamos descapitalizados, y la casa quedo abandonada, solo unas cuantas vacas que tenía mi hermano nos quedaron de aquel infortunio. En la aparte de abajo, en el arroyo de la tierra blanca, mi papá puso un capillita, y en uno de los pisos, dejo la forma para una capilla de tres naves, más grande para mi hermano el padre. Nosotros, la familia, los hijos, incluso mi mamá, nunca fuimos de la idea de que hiciera esa obra. Le decíamos haga un hotel, compre una casa en Guadalajara. Pero ese era su pensamiento. En otro rancho que tenemos también comenzó una casa grande que no esta terminada. El era de la idea de darle trabajo a la gente, pero su visión no fue para hacer negocio. Aquí en el pueblo nunca le gusto comprar casa, todas las que compraba las vendía.
REFLEJO. Por lector
Este domingo algunos encandilados por las televisoras tenían la "esperanza" de una victoria de la Selección de "todos", pero no la caída fue dura porque todos los sueños se vinierosn abajo con un resultado adverso de 3-1 contra los Argentinos. Esto es el REFLEJO de lo que pasa en la sociedad, amiguismos, compadrazgos y preferencias es lo que llevo a este esquipo a lo mismo, cuando se ocupa el carácter, los argumentos, los hechos simplemente se apanica y piensan que estan en el fút-bol local, que esta controlado por las televisoras que han de nuestro deporte más popular de México, corrupción, monopolio, amiguismo, palancas y demás argucias oscuras una mediocridad deportiva descarada, con la complicidad rampante de los "cronistas" deportivos de televisa y tvazteca, hacer una caja idiota en lugar de ser una ventana al mundo, esto es, porque no construyen nada, quieren influir en la opinión de los aficionados muchos de ellos villamelones producto de la comercialización y la moda generda desde la televisión, con comentarios que son una ofensa para la inteligencia humana, pero como descontrolan a uno que otros despistado. Esto le sirve además al gobierno para distraer a los ciudadanos de los problemas que afectan a todos, por ejemplo el día de la inauguración del mundial entre México y Sudáfrica, fué el día más violento del sexenio (con alrededor de 85 a 90 muertos, ofialciamente), el incremento mensual de las gasolinas que cada día se pone más inalcanzable, (cuando a inicios del mes de manera sorpresiva "suspendieron" el aumento, para 11 días después, ya distráídos los mexicanos con el fút-bol, se vino el aumento, sin duda que el "Presidente" de la República, fué "apoyar" y "aceptar" la invitación del Presidente de Sudafrica, el país sigue en el marasmo de problemas de empleo, inseguridad, crisis económicas, falta de credibilidad en las instituciones, políticos inpetos y con evidentes carencias para negociar soluciones en base a las necesidades de los pobladores de este país. Al gobierno del estado también le sirve esta distracción y el sueño de ser "campeones del mundo", la falta de produtividad, la incompetencia para cumplir las necesidades de varios sectores de la sociedad en el municipio la inoperanica del ayuntamiento en todos los aspectoscelebramos 6 meses sin ninguna obra pública, solamente la "administración corriente", es es el pago de la nómina, muchos de ellos holgazanes, zanganos e ineptos, con una evidente falta de conocimiento de la funciones que deben desempeñar, y de conocer cuando menos el principal objetivo de una administración pública, el servir a los ciudadanos con calidad y espiritu de servicio, al contrario se sienten dueños de los puestos que desempeñan, por eso el descontrol se denota, se palpa, se siente, esta inoperancia que afecta a todos. Por eso "nuestra selección" es el reflejo de nuestra triste realidad: puros sueños, puras promesas, puros discursos faltos de visión y apegados a la realidad del contexto, por eso nunca creí en esta selección y sigo sin creer en este "proyecto de país" de empresarios hambreadores del pueblo.
DON PAULIN
Le recuerdo perfectamente bien, moreno en serio, pelo entrecano, robusto con modestia; bien trincado en su pantalón de perchera presuntuosamente nuevo y con su sombrero de palma, tipo antena parabólica, siempre a la mano; los bigotes muy negros, y gruesos, como de tejaban. Sentado imperturbable en su equipal frente a su carretilla de cacahuates, siempre frescos y perfectamente tostados. Encima de la carretilla una canasta repleta de pepitas de calabaza, doradas, limpias y resplandecientes. La mercadería de don Paulin siempre de primera; excelencia en sus productos, capaz de satisfacer al cliente más remilgoso.
A las siete de la tarde era seguro encontrarle en la esquina de Morelos e Hidalgo, frente a la Terminal de Autobuses, mientras alguna que otra beata retrasada, apresuraba sus pasos hacia el rosario de las siete y en su camino recogía casi como por descuido un solo cacahuate de la carretilla.
-Adiós don Paulin, saludaba obsequiosa.
-Adiós cacahuate, lacónica respuesta de don Paulin.
Apenas habían pasado las ferias de Mayo, llevándose con ellas la algarabía, regocijo y dineros de los colotlenses y heredándonos un pueblo semidesierto y empobrecido. El azar o alguna circunstancia ya olvidada nos llevó en pos de piromaniaca diversión infantil, hasta ese rincón de la plaza. Comenzaba a caer la noche cuando el aun inocente chaparro Gomina, de pelo rizado y ojos soñadores, llegó con una bolsa de estraza colmada de palomitas y brujas, contagiándonos de contento con su risa fresca, que brotaba a borbotones de su boca abundante y cuajada de dientes monumentales y dispersos. En un santiamén le pusimos la alegría que le faltaba a la noche y don Paulin mudo e inexpresivo testigo de nuestra francachela infantil, pretendía no estar allí. Las palomitas explotaban sordas en derredor del cacahuatero en tanto que las brujas evolucionaban incansables por cada rincón de esa esquina de la plaza. En algún imprudente momento, don Paulin se levantó de su equipal con toda la dignidad de su abundante continente para sonarse las narices en el raído pañuelo que guardaba en uno de los bolsillos traseros de su ropa. De espaldas a la iglesia jamás pudo ver como la bruja que el Chaparro lanzó, picando tres veces sobre el suelo, vino a estrellarse en su pierna y de allí a alojarse sobre el asiento del equipal. Parsimonioso, don Paulin se sentó sobre el proyectil chisporroteante, que inquieto buscaba escapar de tan sorpresiva prisión, pero don Paulin imperturbable y pese a los evidentes movimientos y humos que salían de su trasero se mantenía incólume, hasta que traspasando el travieso fuego la mezclilla del pantalón y el cuero de su cartera, vino a morderle con singular ardor los glúteos, en ese momento don Paulin se levantó de un saltó y con una imprecación, apagándose el incendio con las manos, mientras que el Chaparro se retorcía en el suelo, con esa risa estentórea y contagiosa tan suya.
-Vas a ver condenado Chaparro, le voy a decir a tu Papá, fue lo primero que pudo decir después que recupero la compostura don Paulìn, y efectivamente, no solo le dio la queja, sino que también de pasada le cobró un buen pantalón de perchera y una cartera.
No sabría decir si a don Paulìn le gano la vanidad o el prurito por la salud, pero un buen día se puso a dieta, y no falto quien le diera una receta milagrosa con la que perdería todos esos kilitos de más. Ni tardo ni perezoso la puso de inmediato en practica, se fue al rastro y siguiendo al pie de la letra las indicaciones, apuro de un solo trago un vaso de hiel, de un toro recién sacrificado, por lo menos esa era la explicación que daba a todo aquel que le preguntaba como había hecho para adelgazar tan rápidamente. En efecto en cuestión de días comenzó a perder kilos como por ensalmo, y a nadar en sus pantalones de perchera, sin embargo el truco mágico no se detuvo ni aun cuando ya se había llevado toda su carne y con ello la vida. Fue tan rápido su paso de la vida plena y rozagante a la muerte, flaca y esmirriada, que nadie lo creía.
Pese a los cambios y mejoras, todavía sigo encontrando a don Paulìn en ese rincón de la plaza, frente a los taxis, sobre todo en la noches posteriores a la partida de la feria y extrañando la excepcional calidad de sus cacahuates y semillas.
El Invictus de Jelipillo
Ayer domingo Argentina desquebrajo con tres goles, el sueño mexicano de ganar nuestra primer copa mundial de fútbol, no fue suficiente la inspiración que les imbuyó Jelipillo Mandela a los seleccionados nacionales, para llegar tan siquiera al quinto partido. Quizás si Jelipillo no hubiese sido el espurio, o hubiese aprendido a escribir o motivar con mayor persuasión, o si por lo menos lo hubieran metido un par de años al frescobote, con tanta barbaridad como ha cometido, quizás solo entonces hubiese sido capaz de inspirar esa determinación y coraje como eran necesarios para abatir a Argentina, Alemania, Brasil o cualesquier otro rival en la copa del mundo. La única lección valida después de tan sonada y anunciada derrotada, es aquella que a los mediocres, mas le vale no meterse a Mesías iluminados y motivadores deportivos. Y para nosotros los mexicanos, mas nos vale no volver a creer en chaparritos simpaticones. Calderón era un derroche de amor y simpatía durante la campaña, quien no recuerda al chaparrito trepado en el trailer y jalándole a la cadena del claxon o maravillándonos con sus gráciles pasos de cumbia, tal y como nos lo presentaron empalagosamente los medios de comunicación. Bien decía mi abuelo que no había chaparro que no fuera…..pero este se salto la barda y con mucho.
Se dice que a toro pasado es fácil juzgar de los presidentes mexicanos, pero en mi descargo debo decir que de los panistas Fox me dio mala espina, cuando se aferro a su famoso “Hoy”, donde todos vieron un rasgo de determinación, yo solo encontré obstinada necedad y falta de luces para negociar un buen acuerdo, el tiempo me dio la razón. En cuanto a Calderón, cuando lo vi perder toda la compostura bailándose una cumbia sabrosona para echarse unos votos a la bolsa, fingiendo ser algo que a todas luces no era, tome medida de la compostura moral del candidato. Hay cosas que el amor propio de un individuo honesto no se permitiría sin ser absolutamente necesario para la subsistencia de una causa noble, esa es una de ellas. Una pena que Jelipillo no se siga promocionando como bailarín, quizás le granjearía mayores índices de popularidad o y de perdiz, se le olvidaría el semblante de vinagre que le ha acompañado durante su gestión.
A la sombra de la sonada campaña de apoyo a la selección mexicana de fútbol para remedar el milagroso Invictus de la selección sudafricana de Rugby, se han dado los más terribles golpes a los obreros mexicanos de este siglo (la compañía de Luz y Fuerza del Centro) así como los aumentos a la gasolina y energéticos, después se ha apoyado en los miembros de selección de fútbol para utilizarlos como estandartes para llamar a la unidad nacional en la guerra contra el narcotráfico, así como comodines de una campaña publicitaria de programas oficiales y, por último, como arietes en los festejos patrios de 2010. Calderón ha utilizado con total cinismo la debilidad mental futbolística del mexicano para sacar mayor ventaja en este cruel saqueo que ha hecho del pueblo mexicano. A la infamia le ha agregado una y otra vez la burla y el escarnio, empeñado en no dejar en pie cobijo institucional alguno al pueblo mexicano, se ha abocado a destruir uno a uno los cada vez más escasos soportes de nuestra vocación democrática y espíritu de libertad, independencia y autonomía. Ha continuado incansable la nefasta tarea neoliberal, empeñado a toda costa en entregar a intereses particulares, nacionales y extranjeros, los sectores estratégicos de nuestra economía (petróleo, comunicaciones, recursos naturales, alimentos, industria etc); a golpeado a los últimos sectores obreros organizados, busca a toda costa disminuir la educación universitaria nacional y revertir los escasos logros educativos del sistema de educación básica, limitando aún mas las escasas dotes criticas del pueblo mexicano; le ha abierto las puertas a la mas estéril y sangrienta lucha de todos los tiempos, la del narcotráfico, para fortalecer a sus adeptos y demostrar la vulnerabilidad de México; ha traído de regreso las voces cascadas y anacrónicas, mil veces superadas y echadas del paraíso de la clerecía católica; ha rendido complaciente, la vocación libertaria y de respeto a la autodeterminación de los pueblos, de nuestra política exterior, forjada durante décadas de enfrentamiento con la política irresponsable y unilateral de nuestro vecino del norte. Ha entregado los recursos provenientes del petróleo a una cada vez más grande y voraz burocracia panista, en menoscabo de las posibilidades de desarrollo y sobrevivencia autónoma del país. Ha sido capaz de desvirtuar aun más las escasas políticas culturales de nuestra nación y por si fuera aún poco, se ha atrevido todavía a meter sus sucias manos en una materia que le compete solo a Dios y al destino:
Se dice que a toro pasado es fácil juzgar de los presidentes mexicanos, pero en mi descargo debo decir que de los panistas Fox me dio mala espina, cuando se aferro a su famoso “Hoy”, donde todos vieron un rasgo de determinación, yo solo encontré obstinada necedad y falta de luces para negociar un buen acuerdo, el tiempo me dio la razón. En cuanto a Calderón, cuando lo vi perder toda la compostura bailándose una cumbia sabrosona para echarse unos votos a la bolsa, fingiendo ser algo que a todas luces no era, tome medida de la compostura moral del candidato. Hay cosas que el amor propio de un individuo honesto no se permitiría sin ser absolutamente necesario para la subsistencia de una causa noble, esa es una de ellas. Una pena que Jelipillo no se siga promocionando como bailarín, quizás le granjearía mayores índices de popularidad o y de perdiz, se le olvidaría el semblante de vinagre que le ha acompañado durante su gestión.
A la sombra de la sonada campaña de apoyo a la selección mexicana de fútbol para remedar el milagroso Invictus de la selección sudafricana de Rugby, se han dado los más terribles golpes a los obreros mexicanos de este siglo (la compañía de Luz y Fuerza del Centro) así como los aumentos a la gasolina y energéticos, después se ha apoyado en los miembros de selección de fútbol para utilizarlos como estandartes para llamar a la unidad nacional en la guerra contra el narcotráfico, así como comodines de una campaña publicitaria de programas oficiales y, por último, como arietes en los festejos patrios de 2010. Calderón ha utilizado con total cinismo la debilidad mental futbolística del mexicano para sacar mayor ventaja en este cruel saqueo que ha hecho del pueblo mexicano. A la infamia le ha agregado una y otra vez la burla y el escarnio, empeñado en no dejar en pie cobijo institucional alguno al pueblo mexicano, se ha abocado a destruir uno a uno los cada vez más escasos soportes de nuestra vocación democrática y espíritu de libertad, independencia y autonomía. Ha continuado incansable la nefasta tarea neoliberal, empeñado a toda costa en entregar a intereses particulares, nacionales y extranjeros, los sectores estratégicos de nuestra economía (petróleo, comunicaciones, recursos naturales, alimentos, industria etc); a golpeado a los últimos sectores obreros organizados, busca a toda costa disminuir la educación universitaria nacional y revertir los escasos logros educativos del sistema de educación básica, limitando aún mas las escasas dotes criticas del pueblo mexicano; le ha abierto las puertas a la mas estéril y sangrienta lucha de todos los tiempos, la del narcotráfico, para fortalecer a sus adeptos y demostrar la vulnerabilidad de México; ha traído de regreso las voces cascadas y anacrónicas, mil veces superadas y echadas del paraíso de la clerecía católica; ha rendido complaciente, la vocación libertaria y de respeto a la autodeterminación de los pueblos, de nuestra política exterior, forjada durante décadas de enfrentamiento con la política irresponsable y unilateral de nuestro vecino del norte. Ha entregado los recursos provenientes del petróleo a una cada vez más grande y voraz burocracia panista, en menoscabo de las posibilidades de desarrollo y sobrevivencia autónoma del país. Ha sido capaz de desvirtuar aun más las escasas políticas culturales de nuestra nación y por si fuera aún poco, se ha atrevido todavía a meter sus sucias manos en una materia que le compete solo a Dios y al destino:
el fútbol.
Sunday, June 20, 2010
No podemos avanzar en tanto el estado mexicano no sea garante de la proteccion y seguridad de sus ciudadanos. Pero quien es el estado mexicano? quienes lo representan? porque esta entidad abstracta, esta construccion historico social no puede garantizar la paz social y la seguridad de sus ciudadanos? Aqui cabrian muchos puntos de vista, analizar, debatir consensar etc, etc. Sin embargo ninguna de las conclusiones realmente importaria ni tendria mayor trascendencia en la realidad de nuestro pais y comunidades.Hace ya mucho tiempo que la oportunidad de construir un pais sobre bases racionales y justas se siguio de largo, ahora el estado ineficiente y corrupto naufraga en las crecidas aguas que no quizo o no supo contener. Por ello los discursos son tontos y fuera de lugar, estas palabras son inoperantes ante la contundencia de las armas, del absurdo de una vida reducida a la violencia.Nada, absolutamente nada justifica una vida dedicada a lucrar con la sangre de los pueblos. Donde muere la civilidad se establece la barbarie, en la barbarie no hay reglas y no hay ley, las leyes son la costumbres que aceptan los pueblos como normas para regir su convivencia y convivir significa coexistir. La violencia y el caos acaban con todo eso.
Pero despues de todo este es un buen momento para empezar a actuar. los problemas estan ahora a la vista de todos, no se oculta nada, del gobierno sabemos lo que debemos saber; ahora en este preciso instante se deben de aplicar los remedios y las soluciones. Seamos mas participativos, demos un poco mas de nuestro tiempo, de nuestros interes, de nuestra ayuda, promovamos sociedades que nos enriquezcan,demandemos de nuestros lideres autentico compromiso en los asuntos vitales para el presente, pero ante todo un compromiso por el futuro, atrevamonos a exigir y sancionemos los actos de deshonestidad, cerremos filas con todos aquellos que puedan darnos ejemplo y hagamos de nuestras vidas en comunidad una manera de irle cerrando el paso a los graves problemas del pais. M